Neuropsicología: Localización cerebral y desórdenes funcionales (Frenología moderna)

Dentro de lo que llamamos "frenología moderna" se han construido mapas funcionales en el que se proponen correlaciones muy específicas de funciones psicológicas con áreas bien determinadas a nivel de la corteza. Es así como el análisis de las correlaciones entre localizaciones y funciones mentales complejas nos llevará a hablar de los distintos tipos de síndromes neuropsicológicos.

Síndrome y definición
Afasia = Alteración del lenguaje
Alexia = Alteración de la lectura
Agrafía = Alteración de la escritura
Acalculia = Alteración del cálculo
Agnosia = Alteración en reconocimiento visual complejo
Apraxia = Alteración en efectos motores complejos
Alteraciones ejecutivo-conceptuales y emocionales = Alteración en los lóbulos frontales

Dado que la neuropsicología es una ciencia en donde convergen muchas otras disciplinas, los avances en neurología y electrofisiología redundan en una mayor especificidad de las relaciones entre el cerebro y las funciones mentales (Benton, 1988; Boller, 1991; Cárter, 1998; Code, 1996; Hecaen, 1972). Los descubrimientos que, por ejemplo, se han realizado al estimular con electrodos algunas zonas muy específicas del cerebro durante cirugía, han permitido correlacionar eventos psicológicos (como recuerdos episódicos o pérdida de comprensión) con regiones particulares. Este tipo de procedimiento dio lugar a lo que conocemos como el "homúnculo", una representación del cuerpo muy específica en las áreas motoras y sensitivas primarias, donde cada parte tiene una localización muy especializada.
Del mismo modo, otras investigaciones al respecto del desarrollo evolutivo de zonas neuronales han permitido establecer otro tipo de cartografía, las llamadas "cartas mielinogenéticas", que muestran el desarrollo de las distintas áreas del cerebro a lo largo del tiempo. Este tipo de investigaciones ha permitido, por ejemplo, explicar por qué los niños distéxicos, que son normales hasta los 5 o 6 años, no desarrollan el problema sino hasta que las zonas comprometidas con la lesión llegan a desarrollarse. También, una de las teorías desarrolladas actualmente con respecto a la esquizofrenia demuestra que dado que la zona prefrontal se desarrolla en la preadolescencia,
las personas que sufren de este mal permanecen normales hasta los 19 ó 20 años (Bustamante, 1978).