ASPECTOS EXPRESIVOS DE LOS DIBUJOS PROYECTIVOS

ASPECTOS EXPRESIVOS DE LOS DIBUJOS PROYECTIVOS

ASPECTOS EXPRESIVOS DE LOS DIBUJOS PROYECTIVOS

Cuando tratamos de ocultar lo que nos ocurre nos delatan los músculos del rostro, nuestras posturas, etc. Muchas veces son más expresivos que nuestras palabras. El lenguaje muchas veces es más lo que oculta que lo que expresa. La actitud de un paciente al enfrentar las pruebas puede revelar características de su personalidad (que dibuje con alegría o irritación, hablando o en silencio, tenso o calmado, confiado o dudoso, etc.) interesa saber si ofrece la cooperación básica o es solo superficial (los dibujos de palotes, encubren deseos de no cooperar). Además hay evaluar  la estructura o expresión (que abarca el tamaño, la presión y calidad de la línea, el emplazamiento, el grado y área de completamiento, los detalles, la simetría, perspectiva, proporciones, sombreados, reforzamientos y el borrado) y el contenido de los dibujos (que abarca la postura de las figuras, la expresión facial y la importancia que se da a los distintos detalles.
Los movimientos expresivos de los niños son un gran potencial diagnostico. Los que en la consulta se retiran a un rincón y se mantienen retraídos, probablemente dibujen también ahí, y exprese lo mismo en su dibujo, el niño que se expande sobre la mesa, probablemente ninguna hoja será suficientemente grande para él, ya que los niños se expresan de una manera más franca y directa que los adultos quienes utilizan defensas para encubren sus necesidades básicas, por lo que a menudo se a considerado que las técnicas proyectivas poseen mayor utilidad que con los adultos.
Wolf demostró la confiabilidad en los movimientos expresivos, la correlación entre la personalidad y los patrones psicomotores.
La secuencia en que emergen los impulsos, las defensas y adaptaciones, nos van mostrando cambios dinámicos y económicos, que ponen de manifiesto los rasgos estructurales del sujeto ej: quien primero dibuja un sujeto con hombros pequeños (muestra de inferioridad) que luego borra (intenta encubrir como) y dibuja hombros compensatorios (una mascara de idoneidad y adecuación). Casi tan importante como observar esta secuencia, es observar la secuencia de dos dibujos diferentes, lo que da indicios sobre el impulso y la energía de la persona, y el control sobre dichos impulsos (ej: si se pasa de un dibujo a otro y viceversa, continuamente). La secuencia de tratamientos que realiza a la línea, a veces también tiene una importancia diagnostica. Estas secuencias muestran una serie de conductas registradas en el papel.
El tamaño da indicios del realismo de la autoestima, de su auto-expansividad característica o sus fantasías de omnipotencia (ej.: los dibujos pequeños hablan de sentimientos de inferioridad, inadecuación y quizás de tendencias al retraimiento, la dependencia. Los muy grandes expresan fuertes corrientes agresivas o de descarga motora, y si estos tienden a presionar los bordes de la página, manifiestan sentimientos de constricción ambiental acompañado de acciones o fantasías sobre compensatorias.)
Las presión, así como el tamaño, es un indicador del nivel energético de la persona. Los que dibujan con trazos más fuertes (muchas veces presentes en psicópatas, orgánicos, epilépticos, encefálicos y personas extremadamente tensas) son más asertivos que los que hacen trazos livianos (con bajos niveles de energía o restricción y represión) muchas veces presentes en esquizofrénicos crónicos, catatónicos avanzados, débiles mentales, depresivos y personas que se sienten desubicadas.
El trazo largo indica un fuerte control en la conducta; el corto, una mayor impulsividad; los rectos, autoafirmación, y son asociados a los estados de ánimos agresivos; los circulares, mayor dependencia y emotividad, asociados a la femineidad; las líneas dentadas se asocian a lo más agresivo y hostil; las quebradas, indecisas o que poseen continuidad solo porque fueron varias veces reforzadas, muestran inseguridad o ansiedad; las se ven como tirantes (delgadas y como estiradas a lo largo) muestran estados emocionales rígidos o tensos. Si las líneas fragmentadas o esbozadas están muy destacadas, expresan ansiedad, timidez, falta de autoconfianza, vacilación en la conducta y en el enfrentamiento con situaciones nuevas. Hay personas que dibujan figuras con las líneas todas desconectadas (ej: los ojos fuera del rostro) sin ninguna conexión, lo que es un claro indicio de tendencias psicóticas.
Los detalles inadecuados transmiten una sensación de vacío y reducción energética, y  son los preferidos de las personas con claras tendencias al retraimiento, que utilizan el aislamiento emocional como defensa, y en ocasiones en depresivos. El empleo excesivo de detalles (en cualquier objeto del dibujo) es característico de los obsesivos compulsivos (en una población emocionalmente perturbada). Los dibujos con elementos rígidos (como personas con la cabeza y el cuerpo erecto, las piernas apretadas entre si, y los brazos pegados al cuerpo, dibujos con actitudes de escasa libertad) y repetitivos, es propio de neuróticos que necesitan ordenar su mundo interno y/o externo creando un mundo ordenado y estructurado, sin dejar en las líneas ni en el dibujo en conjunto fluir nada de ellos en forma relajada, como todo reunido a la fuerza, como si sintieran que sin esta presión todo se desmoronaría. Los dibujos demasiado perfectos y controlados, son comunes en obsesivos compulsivos, esquizofrénicos incipientes y orgánicos, quienes intentan mantenerse integrados, hipervigilantes, evidenciando un yo débil que teme la irrupción de los impulsos; son personas para las que las relaciones espontáneas con los demás y el mundo representan una amenaza, son incapaces de relajarse y actuar en forma espontánea e impulsiva, solo pueden actuar bajo la imposición del deber.
Los dibujos con falta de simetría revelan inadecuados sentimientos de inseguridad en la vida emocional. Si la simetría bilateral está acentuada al punto de la rigidez, el control emocional es del punto obsesivo compulsivo, y puede expresarse como represión e intelectualización exagerada. Los depresivos también someten sus dibujos a una inflexible simetría.
Los niños que realizan sus dibujos con un emplazamiento al medio de la hoja manifiestan una conducta más emotiva y centrada en ellos mismos, indica una alta seguridad (a menos que sea un centramiento en extremo minucioso). Los que hacen dibujos descentrados son más dependientes e incontrolados. Cuanto más a la derecha este el dibujo, es más probable que el sujeto tenga un comportamiento estable y controlado, que postergue la satisfacción de sus necesidades e impulsos, y que prefiera las satisfacciones intelectuales (o inhibición) a las emocionales, son sujetos introvertidos (que se asocia a la capacidad de postergar las satisfacción). Cuanto más a la izquierda, es más probable de que el sujeto actúe en forma impulsiva, y busque la satisfacción inmediata, franca y emocional de sus necesidades e impulsos, son sujetos extrovertidos (que se asocia a la búsqueda de satisfacción inmediata). El emplazamiento en el eje vertical arriba, indica que el sujeto siente que tiene que realizar grandes esfuerzos por alcanzar sus metas, que son casi inalcanzables; o que busca la satisfacción en las fantasías; o que se mantiene distante y relativamente inaccesible. Si esto se da en niños, estos en general alcanzan altos niveles de éxito y ejercen constantes esfuerzos para lograrlos; pero si se da en adultos, estos en general son personas inseguras (en el aire). En el eje vertical abajo, indica que se sienta inseguro e inadaptado, lo que le produzca estados de depresión o de actitudes derrotistas; o que se encuentre ligado a la realidad u orientado a lo concreto. Pero es común que los niños pequeños (y los sujetos regresivos) realicen sus dibujos en el cuadrante izquierdo superior; si están pegados al borde de la hoja, se evidencia necesidad de sostén, temor a la acción independiente y falta de seguridad. Y que a medida que avance la edad los dibujos se vayan desplazando hacia el centro.
Solo ocasionalmente aparece movimiento en los dibujos proyectivos, y cuando parecen generalmente es en dibujos de niños dotados. Los depresivos dibujan pocos elementos móviles, los psicóticos muy pocos o muchos, y los niños débiles mentales son los ue menos los incluyen.
Las síntesis defectuosas en los dibujos (masas confusas  y desordenadas de detalles sin ninguna idea directriz) es característico de personas con trastornos emocionales graves, propio de la psicosis. Además,  muchas veces mezclan medios, como la escritura y la pintura, como un intento por compensar la posibilidad de ruptura de la capacidad de comunicación básica. El arte psicótico mantiene un monologo interno (el artista genuino mantiene un diálogo con el mundo). Muchas teorías rechazan la hipótesis de que este carezca de significado, dicen que las proyecciones simbólicas son todas significativas aunque no tengamos las capacidades para comprenderlas.

CAP 4
DIBUJO PROYECTIVO DE LA FIGURA HUMANA

Pese a que su interpretación, a igual que para el Rorschach o cualquier otra técnica psicológica, no tiene suficiente validación experimental, es una fructífera, económica y profunda fuente de información y comprensión de la personalidad.
En ocasiones Freud cometió el error de hacer interpretaciones simples, como que un sombrero simbolizara un órgano genital, pero se corrigió al descubrir la complejidad del símbolo y de la formación del síntoma (un sombrero en un sueño, una fantasía o un dibujo puede tener un gran número de significados según el contexto o la matriz organizacional que lo produce. Todo dibujo, síntoma, fantasía o acto tiene una historia (campo de vectores organizado y dinámico, multidimencional) de la cual  surgieron; el dibujo o símbolo es económico y está sobre-determinado.
Supuestos básicos:
1) todos los actos están determinados. Pero para que los dibujos proyectivos sean una técnica psico-diagnóstica, debe ocuparse de segmentos nucleares de conducta.
2) Los dibujos están determinados por factores psicodinámicos nucleares
3) Esta nuclearidad surge del concepto de “imagen corporal”. Cada uno de nosotros posee en su aparato psíquico una imagen de sí mismo.
4) Aunque los dibujos estén determinados por una combinación de factores culturales, personales, transitorios o caracteriológicos, pueden ser aislados identificados y, asta cierto punto, cuantificados.
5) Existen operaciones intermedias entre los detalles de un dibujo y las fuerzas que lo determinan; estas operaciones poseen una gramática y una sintaxis similar a las de los símbolos oníricos, las fantasías y los síntomas.

Técnica:
Es un tipo de test situacional en que se enfrenta al examinado, no solo a dibujar sino tb a una situación determinada y a adaptarse a ella. Éste se compromete en conductas verbales, expresivas y motoras. Estas conductas así como el dibujo ofrecen datos para el análisis psicológico.
Proceso básico:
Se entrega al examinado un lápiz blando y papel en blanco de 21 por 28 aprox. ubicados al alcance de su mano para que seleccione la hoja y la posición que desee. El escritorio debe tener una superficie liza  e iluminación suficiente. Debe estar sentado con comodidad, con espacio suficiente para piernas y brazos, que asuma un estado de relajación habitual, y así poder suponer que cualquier tensión psíquica es endógena y no provocada por la situación física externa.
Consigna: luego de establecido el rapport, el examinador dice: “por favor dibuje una persona”, si este duda por sus habilidades artísticas, se le puede decir: “no importa, no nos interesa cómo dibuja, sino que dibuje una persona”, sin dar ninguna otra especificación. Si el examinado sigue reticente, se podrán utilizar todas las técnicas de persuasión  que se conozcan, pero sin dar información específica adicional. Deberá destacarse que el talento artístico no es importante y que cualquier cosa que haga estará bien.
Si dibuja una figura incompleta (con la “total” omisión de las siguientes áreas: la cabeza, el tronco, el brazos o las piernas), se le pide que dibuje otra pero completa, en otra hoja, estas hojas se van enumerando. Si hace a penas un esbozo (figuras de palotes) o estereotipos o representaciones abstractas, se le pide que haga otro, pero esta vez no como estereotipo…(según sea el caso), y deben repetirse las consignas hasta que resulte un dibujo satisfactorio de la figura humana.
Si dicha figura es un hombre, se dice: “esta es una figura masculina; por favor dibuja ahora una femenina” y si es una femenina, al revés.
Observaciones e interpretaciones: la técnica consiste en el registro descriptivo e interpretativo de la conducta y de los dibujos del examinado.

Conducta:
Se ven aspectos verbales, motores y de orientación.

Análisis del dibujo:
Lo común es que se dibuje primero la figura del mismo  sexo, es posible que un pequeño grupo de pacientes y de homosexuales  dibuje primero el sexo opuesto, lo que no quiere decir que alguien que dibuje primero el sexo opuesto sea un homosexual u un neurótico. Lo importante si, es preguntarse por qué dibujo primero el sexo opuesto, ya que si es algo atípico, y puede ser por: inversión sexual, confusión de identidad sexual, gran dependencia del padre u otra persona del sexo opuesto o intensa fijación con él, regresión a un estadio de narcisismo primario en el que se es uno con la madre, etc. La pregunta “¿qué sexo dibujo primero?” indica una confusión del rol sexual.
La descripción de la figura permite captar aspectos muy aclaratorios.
El análisis de los dibujos se hace comparando ambas figuras. Si las figuras están muy llenas de detalles, el sujeto es algo compulsivo y está preocupado por el orden, si las figuras se trazan y retrasan, se refuerza este diagnostico. Las manos y los brazos muestran la capacidad para hacer cosas y el contacto con la realidad, los brazos cortos, pegados al cuerpo, con las manos en los bolsillos, muestran que ningún elemento está disponible para la actividad, el ataque, la manipulación o cualquier otra forma de contacto con personas u objetos.
La relación del tamaño entre las figuras también es un elemento muy importante, por ej: que un niño sea más grande que un adulto; o que una sea “mucho” más grande que la otra ¿con cuál se identifica?, puede identificarse con el más chico y burlarse así de sí mismo; en relación al tamaño de la figura respecto al tamaño de la hoja, lo que se vincula con la relación dinámica entre el individuo y su ambiente o las figuras parentales, cómo representa las presiones ambientales, puede sentirse pequeño, inferior (inadaptado), o si la figura es grande, es que frente a las presiones ambientales responde con sentimientos de expansión y agresión. Si esta además tiene su mano en la parte de los genitales, no a abandonado sus hábitos infantiles, deseos masturbatorios; si esta mano es un circulo grande, es porque a reforzado su superyó, a reprimido su impulso prohibido.
Casi todos los dibujos revelan algún tipo de movimiento kinestésico que varía desde la rigidez hasta la extrema movilidad, este último, en general es de sujetos que sienten fuertes impulsos a la actividad motora (inquieto, hipermaníaco, histérico), los de extrema rigidez son de individuos con conflictos graves y profundos, frente a los mantienen un control rígido y, a menudo, endeble. Las figuras sentadas o reclinadas expresan un bajo nivel energético, falta de impulsos o agotamiento emocional. Si las figuras son de tipo mecánico o inanimado, sin ninguna implicación kinestésica, el psicólogo debe estar alerta a otros signos de despersonalización o psicosis.
Las distorsiones u omisiones en la figura sugieren que los conflictos del examinado pueden relacionarse con dicha parte (ej.: los voyeristas con frecuencia omiten los ojos o los dibujan cerrados o con anteojos, los individuos infantiles con necesidades orales dibujan generalmente grandes pechos). Tanto las partes borradas como las sombreadas, reforzadas o sombreadas implican lo mismo que las partes omitidas o distorsionadas.
La cabeza, por lo general es la primera parte que se dibuja. El concepto del yo de la mayoría de los individuos está centrado en la cabeza y el rostro. Si esta es muy grande, es posible que el examinado sea muy pedante, que tenga aspiraciones intelectuales, que sea introspectivo, que huya en la fantasía, o que le duela la cabeza. Si esta está poco clara, es posible que sea en extremo autoconsciente y tímido. Si es lo único que se dibuja, es posible que tenga una grave perturbación del pensamiento. Si es muy clara, en contraste con un cuerpo apenas esbozado, puede que se refugie compensatoriamente en la fantasía, o que tenga sentimientos de inferioridad o de vergüenza respecto a partes y/o funciones de su cuerpo.
Los homosexuales o narcisistas dan mucha importancia al cabello. Los pelos en la cara, por lo general están ligados a una búsqueda compensatoria de virilidad, por inadecuación sexual o dudas sobre su masculinidad. Si los ojos son muy grandes y la figura masculina tiene pestañas, casi seguro que es homosexual.
Si al dibujar la boca se incluyen los dientes, el examinado puede ser oral agresivo y sádico. Si la boca es una sola línea, debe ser agresivo verbalmente. Si es abierta y carnosa, es posible que sea oral erótico y dependiente.
Si los ojos son grandes, pero están borradas o ausente las pupilas, puede estar expresando culpa vinculada a tendencias voyeristas. Si son grandes y miran con fijeza puede haber paranoia.
Si la nariz es ganchuda, o ancha y abierta, puede estar expresando rechazo o desprecio. Si es muy larga, puede vincularse con impotencia sexual.
Un mentón (socialmente relacionado con la fuerza y la determinación) muy exagerado puede estar indicando fuertes impulsos, tendencias agresivas o sentimientos compensatorios de la debilidad y la indecisión.
Pocas veces se detallan las orejas, pero si están agrandadas o destacadas,  es posible un daño orgánico en  el área auditiva, alucinaciones auditivas si es paranoide, o un conflicto homosexual pasivo.
El cuello puede considerarse el vínculo entre el control intelectual y los impulsos del ello. Un cuello largo puede revelar dificultades para controlar y dirigir los impulsos instintivos, o la presencia de síntomas somáticos en dicha área, o pacientes con dificultades para tragar o perturbaciones digestivas psicogenéticas. O puede ser un paciente esquizofrénico.
Si las manos están ocultas  puede haber dificultades de contacto o sentimientos de culpa relacionados con actividades de manipulación o masturbación. Si son muy grandes, puede indicar conductas compensatorias por sentimientos de insuficiencia manipuladora dificultades en el contacto o inadecuación. Si están excesivamente sombreadas, hay ansiedad respecto a la manipulación o el contacto.
Los brazos apretados al cuello manifiestan pasivos o defensivos. Si son demasiado largos, pueden haber necesidades agresivas dirigidas al exterior. Si los dedos, las uñas y articulaciones están marcadas, es compulsivo o tiene dificultades con respecto con su concepto corporal (como en la esquizofrenia precoz). Los puños apretados sugieren agresión reprimida.
Si las articulaciones, como los codos están delineadas, es compulsivo o dependiente e indeciso, y necesita de otros para reasegurarse.
Si se dibuja la anatomía interna se trata de esquizofrenia o de un maníaco. Si es un cuerpo vago o extraño hay probable esquizofrenia.
Hay que observar bien la figura femenina que hace un hombre, si los pechos son muy grandes, se manifiestan fuertes necesidades de dependencia oral. Si tiene los brazos y manos largas hay necesidades de una figura materna protectora. Si su femineidad está indicada por detalles superficiales o simbólicos, hay que pensar en sentimientos sexuales prohibidos y reprimidos. En la figura masculina, la exageración de hombros, puede indicar inseguridad en la propia masculinidad.
Generalmente las figuras están vestidas, si ni y sus órganos sexuales están expuestos, muestra rebelión contra la sociedad (con los padres) o contra la CC de conflictos sexuales. Los voyeristas suelen dibujar figuras desnudas glorificadas. Si esta corresponde a su autoconcepto, expresa narcisismo corporal. Una figura cuidadosamente vestida corresponde a un narcisismo ligado a la vestimenta o a lo social, presente en personas infantiles y egocéntricas. La excesiva importancia en los botones, habla de personalidades dependiente, infantiles y un ajuste imperfecto. Si estos forman la línea media del cuerpo, es posible que sufra de preocupaciones somáticas. Si están en los puños o en otras áreas poco visibles, y cordones en los zapatos, arrugas en la ropa, etc., posiblemente sea obsesivo compulsivo.
Los bolsillos en el pecho indican privación oral y afectiva, presente en personalidades infantiles y dependientes;  pero también puede indicar identificación psicosexual con la madre (si tomamos el bolsillo como un órgano receptor simbólico). Una corbata exagerada se interpreta como un símbolo fálico, si además la figura es afeminada, probablemente sea homosexual. Si es pequeña puede indicar sentimientos de inferioridad orgánica. Los exhibicionistas frecuentemente dibujan oros. Las pipas, cigarrillos y los bastones se interpretan como búsqueda de virilidad.
Grafología
Un sujeto de gran impulso y ambicioso dibuja con líneas firmes; suaves el que tiene un nivel energético más bajo; con presiones fluctuantes, el ciclotímico, el inestable y el impulsivo.
La preferencia por una dirección del trazo horizontal se relaciona con debilidad, femineidad y vida de fantasía. Vertical , con determinación, hiperactividad y masculinidad asertiva. Si va de derecha a izquierda, habla de introversión y retraimiento, y si va de izquierda a derecha, habla de extraversión, estimulación social y necesidad de apoyo. Si la dirección no vacila puede ser una persona segura y perseverante. Si la dirección es indeterminada y dudosa, es probable que no tenga ni opinión ni puntos de vistas propios, sea inseguro y poco definido.
Las líneas derechas e ininterrumpidas suelen ser de sujetos rápidos y decididos. Las líneas curvas interrumpidas hablan de inseguridad y lentitud. Los trazos muy cortos y abocetados  revelan ansiedad e inseguridad. Si es libre y rítmico puede ser una persona abierta y que responde a los estímulos. Si es constreñido es probable que sea una persona tensa, apartada y coartada. Los contornos claros, definidos, no quebrados, y remarcados, son necesidades de aislamiento y protección de las presiones externas. El sombreado en general indica ansiedad.
El énfasis en los trazos que van de la hoja al examinado, indican encierro en sí mismo, introversión o ansiedad. Y de los que van del papel hacia fuera son signos de agresión o extraversión.
Misceláneas: las figuras de “palotes” o las representaciones abstractas, son signos de evasión, característicos de sujetos inseguros, que dudan de sí mismos. Si son payasos, personajes de historietas, figuras ridículas, hay auto hostilidad. Los de brujas o personajes similares son propios de personajes que sienten rechazo por las mujeres, expresan sentimientos punitivos.
Los compulsivos son fácil reconocerlos porque no terminan sus dibujos y vuelven sobre las distintas áreas agregando detalles. Los histéricos, impulsivos o inestables, por la falta de precisión y uniformidad.

CAP 8

INTERPRETACIÓN DE LA TÉCNICA PROYECTIVA GRAFICA CASA- ARBOL- PERSONA

El HTP muestra la imagen interna del si mismo y del ambiente, lo que se considera importante y lo que se desecha.
Para  que sea estandarizado se piden siempre los mismos temas gráficos, el mismo tamaño de papel,  un lápiz numero 2 con goma y un formulario de 4 hojas blancas de 18 por 21 y solo se ofrece una hoja por vez. Para la casa se ofrece la hoja con el eje más largo paralelo al examinado y para el árbol y la persona perpendicular. Se le pide que dibuje lo mejor que pueda, pero como desee, puede borrar y tomarse el tiempo que necesite. Si intenta usar cualquier ayuda mecánica se le advierte que el dibujo debe ser manual. El orden de presentación de los estímulos es siempre: primero la casa, luego el árbol y último la persona (de las representaciones más neutrales a las más cercanas a la propia persona.
Buck eligió estos ítems por ser familiares a todos, y por ser conceptos simbólicamente muy fértiles de significación ICC. Los sujetos han visto tal cantidad de casas, árboles y personas que eligen lo que para ellos tiene mayor significado emocional.
El objeto favorito de los niños chicos es la figura humana.
LA CASA:
Representa “la imagen de uno mismo (con sus elementos correspondientes: el área de la fantasía, yo, contacto con la realidad, accesibilidad, predominio oral, anal o fálico) y la percepción de la situación familiar (pasado, presente y futuro deseado, o una combinación de los tres).
Pichón Riviére descubrió que la casa puede simbolizar:
a) El cuerpo de la persona: los problemas en el área fálica, frecuentemente son proyectados en las chimeneas, y los del tipo oral, destacando los contornos de las ventanas. Aquí las anomalías en la construcción se relacionan con la alteración de la imagen corporal provenientes de las perturbaciones emocionales
b) El interior de la madre.
c) El  hogar parental: una paciente que se sentía oprimida por las constantes peleas en su hogar, hizo una chimenea con un denso humo hacia arriba.
Aunque psicóticos deteriorados suelen dibujar casas semejantes a úteros (b), los significados simbólicos a) y b) han sido empíricamente confirmados con más frecuencia.
La casa es simbólicamente relacionada con la figura humana y tiene un importante papel no solo en los dibujos infantiles, sino también en el arte primitivo. La persona es el concepto grafico más empapado de las experiencias emocionales del dibujo individual.
En niños, la casa pone de manifiesto la actitud que tiene frente a la situación de su hogar, la relación con sus padres y hermanos.
Las personas casadas , muchas veces representan la situación domestica con sus cónyuges, sin embargo en muchos siguen vigente las relaciones infantiles con las figuras parentales.
Techo: simboliza el área vital de la fantasía (la vida mental). Su tamaño indica la cantidad de tiempo que el sujeto le dedica y el grado en que recurre a ella en búsqueda de satisfacción.
Techos excesivamente grandes, son típicas de pacientes inmersos en la fantasía y apartados del contacto interpersonal como los esquizofrénicos o muy esquizoides, quienes además ubican las puertas y las ventanas dentro del techo quedando una casa techo, esto es porque están retraídos en la fantasía.
La ausencia de techo (o como línea) es más común en los imbéciles (individuos que carecen de capacidad de ensoñación, y dentro de un  CI normal, tienen una personalidad constreñida y un tipo concreto de orientación.
Cuando el techo tiene las líneas reforzadas, no así las otras partes de la casa, es probable que el examinado se esté defendiendo de que sus fantasías  se escapen de control, que los impulsos que se descargaban en las fantasías y comiencen a aparecer en su comportamiento manifiesto o a distorsionar su percepción de la realidad (con frecuencia son pre- psicóticos y, en menor grado neuróticos ansiosos)
Paredes: la fortaleza y adecuación de estas se relaciona con la fortaleza del yo y la personalidad. Por ejemplo, lo refuerzan frecuentemente los psicóticos insipientes, ya que están, conscientemente muchas veces, hiper vigilantes por mantener la integridad de su yo. En cambio, las paredes con líneas débiles muestran un claro derrumbe de la personalidad y un débil control yoico (sin defensas compensatorias), son pacientes más hechos a la idea de su inminente patología. Las paredes transparentes en adultos muestran un claro deterioro en el criterio de realidad (presentes solo en deficientes profundos y en psicóticos), en cambio en niños solo muestra una inmadurez de la capacidad conceptual.
Puertas: simbolizan el contacto con el ambiente. Las puertas pequeñas  o muy por encima de la línea y sin escalones, simbolizan rechazo al contacto con el ambiente, y su correlato conductual es la timidez y el temor a las relaciones interpersonales. Es común en sujetos que solo se conectan con el ambiente en sus propios términos. Las puertas muy grandes, son típicas de sujetos con excesiva dependencia, si están abiertas y el interrogatorio posterior indica que la casa esta ocupada, revelan una gran sed de afecto emocional y que esperan recibirlo desde afuera, y si esta vacía, con las puertas abiertas, indica vulnerabilidad extrema y falta de adecuación de las defensas yoicas. La acentuación de las cerraduras y/o bisagras manifiesta una sensibilidad defensiva, típica en paranoides.
Ventanas: representan un medio secundario de interacción con el ambiente. La acentuación de las cerraduras, también es típica en paranoides. Las persianas y cortinas, con las ventanas cerradas, muestran la necesidad de apartarse y no interactuar con los demás; si están abiertas o parcialmente abiertas, tienden a actuar de un modo controlado (ej.: asistentes sociales, que muestran un control emocional en sus interacciones). Las ventanas totalmente desnudas, que ni siquiera están sombreadas, son de individuos que interactúan de un modo muy descortés, ruda y directa, sin tacto (participante social que normalmente provoca líos). Cuando solo el contorno está reforzado, probablemente hay fijación oral o rasgos orales del carácter, y en ocasiones hay rasgos anales.
El tamaño de la ventana del living debe ser más grande que la del baño, sino, hay un intento por minimizar el living, un evidente fastidio por el intercambio social. Si las ventanas del baño son demasiado grandes, hay un entrenamiento esfinteriano severo (individuos que sufren de culpa masturbadora u obsesivos con el síntoma de lavarse las manos).
El emplazamiento de las ventanas en el que por una pared tiene una altura distinta que en la otra, revela dificultades organizativas y formales, este es un indicio de formas tempranas de esquizofrenia.
Chimeneas: (ya se habló)
Humo: si se desvía mucho hacia un lado, como si hubiera un viento fuerte, indica presiones ambientales, a menudo visto en niños con presiones parentales masivas por dificultades con la lectura, en adolescentes con presiones parentales inapropiadas, y en algunas personas poco tiempo después de haber sido incorporadas a las fuerzas armadas.
Perspectiva: las personas que rechazan la situación hogareña en que se encuentran y los valores por los que ahí se aboga, dibujan la casa como si el observador estuviera arriba (visión de ojo de pájaro), combinan sentimientos de superioridad compensatorios con actitudes de rebelión contra los valores que se le han enseñado (más común en estudiantes de medicina). Los que se sienten rechazadas e inferiores en la situación familiar, que  se sienten incapaz de alcanzar la felicidad hogareña, presentan una baja autoestima y dibujan la casa como mirándola desde abajo (visión de ojo de gusano). Si la perspectiva de la casa es lejana, muestran su sensación de aislamiento o inaccesibilidad (cuando proyectan en la casa la imagen de si mismos); o muestran la sensación de ser incapaz de enfrentar la situación familiar ( si proyectan en la casa el hogar parental). La perspectiva  de “perfil absoluto”, en que el frente de la casa, incluyendo puertas y cualquier acceso están dados vueltas, quedando invisible e inaccesibles, se encuentra en sujetos distantes, oposicionistas paranoicos evasivos o sujetos inaccesibles en las interrelaciones. Las casas vistas desde atrás, especialmente las sin ninguna puerta trasera, se encuentran en de la misma línea, pero en sujetos más patológicos, paranoicos esquizofrénicos en estado pre psicótico (que sienten una tremenda necesidad de protegerse).
Línea del suelo: revela el grado de contacto del examinado con la realidad. El contacto con el suelo firme o débil tiene un enorme valor diagnostico.
Accesorios: hay sujetos que manifiestan su inseguridad rodeando y reforzando la casa con árboles y otros detalles. Un sendero que conduce a la puerta es común en sujetos que ejercen un cierto control y tacto en sus relaciones; pero si el sendero es largo y tortuoso, se trata de sujetos que en sus relaciones, en un principio se mantienen distantes pero que en ocasiones establecen vínculos emocionales con los demás. Si el sendero es en línea recta, muy ancho en el extremo del observador y angosta al llegar a la puerta, más chica que ella, muestra un intento por disimular mediante amistades superficiales los deseos básicos de aislamiento. Los cercos alrededor son una maniobra defensiva.

EL ÁRBOL:
En los mitos, el folklor y el lenguaje diario (como en la idea de árbol genealógico) el árbol siempre a simbolizado la vida y el crecimiento. El individuo que olvida las ramas, es el que no se ramifica, no se mezcla con los demás ni disfruta con ellos.
Los árboles agitados por el viento y quebrados por las tormentas, muestran lo que las presiones ambientales han hecho con ellos mismos. Una mujer con 5 hijos, debajo de un árbol dibujo un canasto con 5 lustrosos frutos, representando así su orgullo materno. Otra con 2 hijos: uno homosexual y otro con problemas en la lectura, dibujo un árbol frutal con 2 manzanas tiradas en el suelo, mostrando así el rechazo ICC por sus hijos y su autoevaluación negativa como madre.
 El dibujo del árbol puede captarse intuitivamente como totalidad en armonía, inquietud, vacío, hostilidad, carencia o abundancia.
Uno debería entregarse pasivamente a los efectos que producen un gran número de árboles, contemplarlos sin actitud crítica, reconocer así las diferencias entre ellos, y conocer más íntimamente a las personas.
El Dibujo del árbol  es paralelo al dibujo psíquico temporal del examinado. En la parte inferior del árbol suelen aparecer las huellas de las experiencias tempranas, y en la parte de arriba, las apariciones más recientes. Cuanto más abajo estén las cicatrices más tempranas han sido las experiencias traumáticas.
El árbol es la imagen de sí mismo en relación al contexto. Para Buck, el tronco representa la sensación que la persona tiene de su poder básico y de su fortaleza interna (la fuerza del yo); la estructura de las ramas representa la capacidad que siente tener para obtener satisfacción del medio (inconscientemente representan sus brazos y sus manos); y la organización total del dibujo revela cómo siente su equilibrio intrapersonal.
Las partes externas de la copa forman la zona de contacto con el ambiente, la relación e intercambio de lo interno con lo externo.
Tronco: si las líneas periféricas de este están reforzadas revelan la necesidad de mantener la integridad de su personalidad. El reforzamiento es una defensa compensatoria para encubrir y combatir la difusión y la desintegración de la personalidad. Si a diferencia del resto del dibujo, estas líneas son débiles se trata de una perdida de identidad, sin la esperanza de que las defensas compensatorias detengan el derrumbe inminente. En estos casos hay una aguda ansiedad. Cuando hay agujeros en el tronco con animales mirando desde dentro, pueden ser sujetos que están disociados (que sienten que una parte de su personalidad está fuera de control y que es potencialmente destructivo), que es el caso de sujetos con sentimientos de culpa obsesiva; o puede tratarse de sujetos que se identifican primariamente con el animal, revelando sus anhelos regresivos por una existencia uterina retirada, cálida y protegida (la identificación con el árbol es más frecuente en adultos y la con el animal es más frecuente en niños. Para hacer la distinción se usa el interrogatorio posterior, otros datos proyectivos y la historia clínica)
Raíces: la excesiva preocupación por el contacto con la realidad se expresa en la exacerbación de las raíces. Las que se ven a través de la tierra son indicio de deterioro del criterio de realidad, si es una persona de inteligencia media o superior,  adolescente o adulta, debe considerarse, solo como posibilidad,  la existencia de otros indicios de un proceso esquizofrénico.
Árbol con base en el borde del papel: propio de sujetos inseguros que padecen de sensación de inadaptación, es como si esto representara una seguridad compensatoria. Es probable en pacientes depresivos (que por lo general emplazan sus dibujos en la sección inferior de la hoja, utilizan líneas débiles como muestra del debilitamiento de la energía y los impulsos, y el árbol favorito en ellos es el sauce llorón)
Ramas: representan los recursos que el individuo siente poseer para obtener satisfacción del medio, para extenderse hacia los demás, ramificarse y tener logros acertados. Algunos intentan disimular sus sentimientos más profundos de incapacidad para obtener satisfacción con un optimismo superficial, dibujan personas con brazos muy largos, árboles con las ramas troncadas, lo que revela que no tiene muchas esperanzas de éxito. Las ramas altas y angostas, que se extienden hacia arriba y apenas hacia los lados, son típicas de personas que temen buscar satisfacción en el ambiente, y que se refugian, más de lo necesario, en la fantasía. Los sujetos que las dibujan hasta el tope de la hoja, intentan obtener satisfacción sustitutiva, una inmersión extrema en la fantasía, y debe considerarse un franco estado esquizofrénico, manifiesto o en dibujo. En las que se extienden hacia arriba y a los costados, se advierte un mayor equilibrio. Otros achatan totalmente el follaje del árbol, como tratando de negar o rechazar totalmente el área de la fantasía. Las ramas unidimensionales en troncos unidimensionales, sugieren síntomas de organicidad.          
Este siempre transmite una sensación de incompetencia, de inadaptación, de falta     de fuerza yoica   y una pobre integración de recursos para la búsqueda de satisfacción. La flexibilidad de la estructura de las ramas, organizadas de lo más grueso a lo más fino, con tamaños en proporción adecuada, indica una gran habilidad para obtener satisfacción del ambiente. Las ramas tipo garrote o lanzas con puntas afiladas, o como pinches tipo púas, señalan la presencia de intensos impulsos hostiles y agresivos, y si la conducta manifiesta es muy apacible y dócil, solo se trata de un ajuste superficial, logrado por esfuerzos represores masivos y una tensión interna considerable, con posibles irrupciones impulsivas en la conducta y agotamiento de su potencial defensivo. Las ramas bidimensionales y abiertas en los extremos, revelan un escaso control sobre la expresión de los impulsos.
Las ramas que parecen penes más que ramas son típicas de personas con preocupaciones sexuales y/o luchan por la búsqueda de la virilidad. Las ramas rotas y cortadas expresan la sensación de estar traumatizado y de no constituir una unidad interna completa (de castración expresado en sentimientos de inutilidad, inadaptación, de extrema pasividad y de falta de virilidad hasta la impotencia). Si el tronco está trunco y desde el cabo crecen ramas, es que la persona siente que el núcleo  del yo  esta deñado. Cuando las ramas en lugar de dirigirse al ambiente lo hacen céntricamente, hacia el árbol, estamos frente a un egocentrismo con fuertes tendencias hacia la introversión (esto solo se a observado en obsesivos compulsivos). Las ramas muy grandes en un tronco pequeño, revelan una exagerada preocupación por la búsqueda de satisfacciones. Las estructuras de ramas muy pequeñas en troncos excesivamente grandes indican experiencias de frustración debido una incapacidad para satisfacer imperiosas necesidades básicas. Jóvenes con fuertes necesidades de afecto frustrado suelen dibujar ramas que se extienden hacia el sol, estas buscan el calor de alguna figura autoritaria significativa de la que está necesitado. Los niños que dibujan árboles que se inclinan para alejarse de un gran sol que esta a corta distancia, intentan apartarse de la dominación de alguna figura parental o de alguna figura autoritaria dolorosamente controladora, por lo que se sienten sojuzgados y en consecuencia inadaptados. Las ramas secundarias que se dibujan como espigas (insertas en ramas primarias) y que sus puntas se contactan con el tronco del árbol o con las ramas primarias, aparentando enterrarse en vez de crecer de estas, muestran tendencias masoquistas. Entre la tendencia intropunitiva y extropunitiva, se encuentran sujetos impunitivos,  lo que se ve en las ramas con círculos como nubes, estas son personas cuya agresión no se descarga interna ni externamente (a veces se acompaña de modos suaves de hablar).
Árbol tipo cerradura: el tronco y el follaje están dibujados con una línea continua sin ninguna separación entre la copa y el tronco, igual que en el espacio blanco en el Rorschach, es característico de individuos oposicionistas y negativos (sin negarse totalmente a hacer el dibujo, hacen lo menos posible)
Árbol disociado: las líneas del tronco no se conectan entre ellas, se extienden hacia arriba formando cada una su propia rama y parecen 2 árboles unidimensionales; indican una ruptura de la personalidad, el derrumbe de las defensas y el peligro de que los impulsos internos se vuelquen al ambiente.
Tema: hay temas que se explican por sí mismos: el sentido de condena que implica un halcón revoloteando el árbol; o el sentido de degradación que implica un árbol orinado; o el sentido de mutilación corporal que transmite la identificación con una figura parental que amenaza con cortar un árbol.
Las mujeres embarazadas suelen dibujar árboles frutales, y pacientes depresivos, sauces llorones, los niños de 10 a 14 años, manzanos (identificándose con el fruto caído, cuando se siente rechazados).
Edad del árbol: si un adulto en lugar de hacer un árbol dibujo,  hace un pequeño retoño manifiesta sentimientos de inmadurez, pero para mayor exactitud, al final de le pregunta la edad del árbol (la edad proyectada se vincula con el nivel psico-socio-sexual. Los pedofílicos se sienten psicosexualmente inmaduros, por lo que buscan objetos sexuales inmaduros, de la edad a la que ellos se sienten psicosexualmente adaptados (sus actividades sexuales se limitan al tocarse y verse)
Árbol muerto: al final siempre se pregunta por la calidad de vida y muerte del árbol. Los esquizofrénicos, deprimidos y neuróticos graves, a veces dicen que está murto debido a un mal ajuste, a que han perdido las esperanzas de una adaptación adecuada. Este y cualquier otro signo de inutilidad son negativos desde el punto de vista pronóstico. Hay que averiguar si la muerte es causada por algo interno o algo externo. Si son externos, deben haber sentimientos de traumatización; y si es externa, debe sentirse a sí mismo como nocivo e inaceptable. Si se pregunta hace cuanto tiempo ha muerto, esto puede indicar la duración de los sentimientos de desajuste e incapacidad, o de inutilidad o de desesperanza (según el caso).
El árbol capta la imagen más ICC que el sujeto tiene de si mismo, los sentimientos en sus niveles más primitivos, los conflictos y las defensas que estructuran su personalidad. Esta hipótesis la confirma el hecho de que el árbol es el concepto grafico menos susceptible de cambiar en los re test (el árbol como autorretrato esta más alejado de uno mismo, por lo que se proyectan rasgos y actitudes mucho más conflictivos que en el dibujo de la persona).

LA PERSONA:
Esta figura puede motivar 3 tipos de temas:
a) Autorretrato: los pacientes con un CI medio o inferior suelen reproducir sus propios rasgos corporales, como frente a un espejo (la capacidad de abstracción permite la representación de imágenes no especulares). Se proyectan defectos y cualidades físicas, pero además de un yo físico hay un yo psíquico que tb es proyectado, lo que hace posible que un sujeto alto dibuje uno pequeño y brazos colgantes.
b) Ideal del yo: se puede dibujar un ideal del yo en lugar de lo que se siente que es. Como los pacientes obesos que aún se adhieren a su ideal (estos tienen un mejor pronostico) y dibujan una figura delgada.
c) Representación de una figura significativa: sea contemporánea o pasada, positiva o negativa. Se da más en niños que en adolescentes o adultos, por la necesidad de identificarse e incorporar un modelo a su autoconcepto (la figura materna o paterna reproducida es un dato profético respecto a lo que después un re test mostrará que el niño a incorporado.

En el dibujo de la persona se proyectan los sentimientos menos profundos, junto con los recursos que los sujetos emplean para manejarse con los demás y sus sentimientos hacia el prójimo.

Estos 3 conceptos (casa, árbol y persona) son lo suficientemente inestructurados (se le dice que dibujar, pero no de que tipo) como para que surja el significado de estos desde el interior del examinado, y ser así instrumentos proyectivos; el tamaño, el emplazamiento, el sexo, la expresión, la postura, de costado, de perfil, en acción, etc., además de la inclusión y exclusión de los distintos detalles de los elementos, forman parte de creaciones propias del sujeto.
Los dibujos proyectivos ponen de manifiesto el yo sentido, el yo ideal, y- tienta decirlo- el yo futuro (excepto con intervenciones psicoterapéuticas o cambios situacionales significativos)