Condiciones para la instauración de las psicologías del siglo XIX

La consolidación político-institucional de los modernos estados nacionales se produce, sobre todo, en la Europa del siglo XIX. De modo que se acentúa la importancia de los contextos nacionales y sus rasgos diferenciales, arraigados en formas particulares de organización de la enseñanza académica, en tradiciones de investigación, en las distintas relaciones con los Estados y con organismos de la sociedad, incluso en las condiciones variables de libertad de investigación y de autonomía de los organismos científicos y los núcleos intelectuales.
Un problema histórico, justamente, es el que plantean las condiciones en que un autor, una línea de pensamiento o una escuela surgidas en determinado país llegan a tener influencia e implantarse en otro.  Eso se produce siempre de un modo que transforma, a veces mucho, la corriente original y que abre complejos problemas de recepción de ideas, métodos y programas. Por eso, no basta con la descripción de ideas y autores que se suceden y se «influyen» recíprocamente, sino que es preciso analizar las condiciones de implantación y apropiación del conocimiento como un proceso activo. Por ejemplo, si el empirismo surge en Inglaterra, y si la psicología experimental trabaja a partir de la sensación y por lo tanto tiene un punto de partida «empirista», ¿por qué esa corriente no se desarrolla en la tradición inglesa sino que surge en Alemania?. Aparentemente, en Inglaterra estaban, a partir del punto de partida asociacionista, las condiciones para la constitución de una línea preocupada por la experiencia sensorial. Y sin embargo la psicofísica y la psicología fisiológica, como disciplinas de laboratorio, nacen en las universidades alemanas, donde se constituye una tradición experimental que encuentra en el modelo físico y en el ideal de la medición sus condiciones institucionales y al mismo tiempo metodológicas de constitución.
Aquí aparece la necesidad de reconstruir estas corrientes científicas y de pensamiento en el marco de contextos culturales, «climas de pensamiento» y formas institucionales que son específicas. Lo hemos dicho: el modelo fundamental en la constitución de la disciplina psicológica como psicofísica o psicología experimental, en Alemania, es la física; esto es explícito, en el programa de un Fechner, que viene de una formación en física experimental. Aún cuando la psicofísica se desplaza hacia una psicología fisiológica, en realidad lo hace tomando como modelo una fisiología que, en Alemania, no es la misma que la fisiología inglesa. Mientras la fisiología alemana está fundada en la física, se realiza en Departamentos de Filosofía o de Ciencias y se construye en el laboratorio, la fisiología inglesa responde al modelo de la investigación clínica, en gran medida desarrollada en los consultorios, ligada a las Escuelas de Medicina y apegada a los problemas del tratamiento de trastornos neurológicos y psiquiátricos. De allí que los ingleses se interesen por la hipnosis, procedimiento  que, en cambio, los experimentalistas alemanes rechazaban. No sólo la tradición filosófica y metodológica son diferentes, sino que la formación social, cultura e institucional son diferentes y esto da como resultado que no estén proyectando la misma disciplina. En el caso de los fisiólogos ingleses a los que hice referencia, es muy escasa la vinculación con problemas filosóficos y está ausente la preocupación estrictamente metodológica o de investigación básica.
Hay, entonces, dos tradiciones de investigación bien diferentes. En el caso de Wundt, no está dispuesto a abandonar el campo de la filosofía y se opone a la constitución de la psicología como un campo profesional autónomo. En la tradición alemana, ese interés filosófico es muy notorio en Fechner que crea la psicofísica en el marco de su preocupación por resolver matemáticamente la relación entre el mundo físico y el mundo espiritual, es decir por reformular, en términos científico experimentales, la vieja cuestión metafísica de la relación cuerpo-alma. Un segundo rasgo diferencial de la tradición alemana es que la preocupación metodológica sigue el modelo fisicomatemático; de allí que el problema de la medición cumpla un papel fundamental. En cambio, en la tradición fisiológica inglesa no aparece ninguna de estas dos condiciones. Y sin embargo hay una labor de investigación empírica, inspirada en la fisiopatología, que impulsa un desarrollo muy importante de la disciplina.
En cuanto a la tradición psicopatológica y de la clínica de la hipnosis, es la más heterogénea, porque, por una parte,  responde a una corriente propiamente médica, ligada a la constitución de la neurología y la medicina mental, en la que tienen también incidencia los desarrollos de una fisiología, sobre todo la inglesa, de inspiración clínica. Pero, como veremos, la tradición del «magnetismo animal» mantiene su autonomía y sus vías propias de desarrollo y pervivencia, al margen del dispositivo médico; incluso tiene su impacto sobre formas de representación literaria.. Por lo tanto, no se trata aquí de un modelo homogéneo sino de un campo de ideas y de prácticas en el que intervienen intereses y objetivos diversos, aunque, hacia el fin del siglo XIX, van a predominar los ligados a la práctica clínica, cuando la medicina se reapropie de ese campo. Por otra parte, no puede desconocerse que el modelo de la hipnosis se convierte en una matriz explicativa de los fenómenos de masas y se aplica a la definición de las cuestiones de la autoridad y el liderazgo.

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