Diccionario de psicología social, letra G, Grupo familiar

Diccionario de Psicología Social, Letra G, Grupo Familiar

GRUPO FAMILIAR
Conjunto de personas ligadas entre sí por constantes espacio-temporales y vínculos de parentesco, y articuladas por su mutua representación interna, que se propone explícita o implícitamente realizar una tarea que constituye su finalidad. La familia es la unidad primaria de interacción y sostén de la estructura social, y puede analizarse desde los puntos de vista psicosocial, sociodinámico e institucional.

Concepto.- La familia se define de la misma manera que grupo, sólo que deben agregarse a las constantes de espacio y tiempo, los vínculos de parentesco.
La familia «es el sostén de la organización social, unidad primaria de interacción que se establece sobre la base de un interjuego de roles diferenciados. Su carácter de estructura surge de la necesaria interdependencia de los roles correspondientes a la situación triangular básica, padre, madre e hijo, emergentes de las relaciones y diferencias funcionales y biológicas. Esta situación triangular básica y universal, con sus posibles variantes culturales, determina el modelo que seguirán las interrelaciones familiares».
«Cómo unidad básica de interacción, la familia aparece como el instrumento socializador, en cuyo ámbito el sujeto adquiere su identidad, su posición individual dentro de la red interaccional. La ‘funcionalidad’ y la ‘movilidad’ de dicha posición señalarán el grado y naturaleza de adaptación a ese contexto grupal, del que cada sujeto es ‘portavoz'».
Así, «la tarea del grupo familiar es la socialización del sujeto, proveyéndole de un marco y un basamento adecuados para lograr una adaptación activa a la realidad en la que se modifica él y modifica al medio en un permanente interjuego dialéctico». Además, como estructura social básica, la familia es el modelo natural de toda situación grupal.
El mencionado carácter estructural del grupo familiar nos permite abordarlo también como unidad de análisis para el abordaje de la enfermedad mental, en el sentido de que podemos aproximarnos a él encarándolo como unidad diagnóstica, pronóstica, terapéutica y de profilaxis. En efecto, los aportes de la teoría guestáltica, las investigaciones de K. Lewin y las investigaciones del mismo Pichon Rivière permiten considerar a la enfermedad mental, no como la enfermedad de un sujeto sino como la del grupo familiar, desempeñando el enfermo el rol de portavoz.
Así, el principio general que considera Pichon Rivière es el que «todo sujeto que enferma psíquicamente es porque ha asumido un rol particular, y en cierta medida operativo, dentro del grupo familiar, al transformarse en el ‘portavoz’ y ‘depositario de la ansiedad’ del grupo. De esta manera, al adjudicarle el grupo familiar ese rol y asumirlo él, se consigue un efecto que puede expresarse como superación de la situación de caos subyacente«.
«Creada la situación de ‘estereotipo’ funcionan también ‘los mecanismos de segregación’, de expulsión o alienación del paciente. Si esto se produce, el grupo cambia su forma y se estereotipa en el sentido de no admitir más al miembro segregado. El ‘pronóstico’ de la enfermedad de éste está principalmente en relación con la receptividad o no receptividad del grupo. Este suele organizarse para mantener fuera al paciente, realizando a veces verdaderos sacrificios con tal que se mantenga la segregación». La forma de encarar una tarea correctora de esta situación es a través del empleo de la técnica del grupo operativo.