Diccionario de psicología social, letra R, Rol

Diccionario de psicología social, letra R, Rol

ROL
Función social que asume un sujeto y/o que le es adjudicada por los otros, y que resulta de un proceso de internalización que se inscribe en otro más amplio: la socialización del individuo. Pichon Rivière desarrolla la idea de rol tomando como punto de partida las conceptualizaciones de G. Mead al respecto. Los roles pueden ser funcionales y operativos, si están al servicio de la tarea grupal, o rígidos y estereotipados cuando la obstaculizan.

Concepto.- Pichon Rivière toma como punto de partida las ideas de G. Mead. «El concepto de rol [fue] incorporado a la psicología social y desarrollado por G. H. Mead, el gran precursor de esta disciplina, que basó todo su desarrollo en el concepto de rol, su interacción, el concepto de mí, de otro generalizado, que representaría el grupo interno como producto de una internalización de los otros».
Sin embargo, Pichon Rivière propone una visión más amplia que la de Mead, al sostener que el rol se constituye no sólo en relación a los otros sino también en relación al entorno ambiental en su conjunto. Por ejemplo, una persona no asume el rol de campesino solamente porque los otros se lo adjudiquen, o porque lo asuma en forma abstracta sin relación con el medio, sino por el hecho de vivir en un ambiente rural.
Señala Pichon Rivière, en efecto, que «la internalización del otro no se hace como un otro abstracto y aislado, sino que incluye los objetos inanimados, el hábitat en su totalidad, que alimenta fuertemente la construcción del esquema corporal. [Por ejemplo], la noción popular de «querencia» o «pago» va mucho más allá de las personas que la integran y eso se observa en las reacciones en las situaciones de migración: el miedo a la pérdida paraliza al migrador campesino en el momento en que tiene que asumir un rol urbano provocando su marginación».
Pichon Rivière ha estudiado los roles fundamentalmente en relación con la vida de los grupos: éstos se estructuran en base a un interjuego de asunción y adjudicación de roles.
«El rol adjudicado es el rol ‘prescripto’ o rol ‘necesitado’ en el grupo que debe ser cumplido por aquel que asume el rol. En la medida en que coinciden los dos roles, el prescripto y el asumido, se produce el ‘encaje’, la articulación, como sucede, por ejemplo, en un equipo de fútbol, en el que el jugador, al mismo tiempo que internaliza a los miembros de su equipo, realiza lo mismo con el equipo contrario, configurando lo que George Mead llama «el otro generalizado», con el objeto de llegar a una operatividad´máxima… En la interacción del ‘self’ con el otro generalizado se estructura el ‘mí’ (rol operativo diferenciado) que puede ser considerado a través de cuatro momentos de la operación: la ‘estrategia’, la ‘táctica’, la ‘técnica’ y la ‘logística'».
La situación contraria al ‘encaje’ ocurre cuando no coinciden el rol adjudicado y el rol asumido. «En una época el psiquiatra consideraba a los integrantes del grupo como simples individuos que un conjunto indiferenciado, sin tener en cuenta los roles que asumía cada uno de los miembros en el ‘aquí-ahora-conmigo’; les adjudicaba aí un rol equivocado, produciéndose en consecuencia un conflicto intrapsíquico de roles y una actuación patológica. En este caso la pertenencia, cooperación y pertinencia están seriamente perturbadas, originándose una patología social por rechazo, indecisión o incapacidad de asumir el rol adjudicado».
Un grupo operativo está poblado de roles prescriptos o puestos: en el acontecer grupal, determinadas personas van a asumir estos roles correspondientes de acuerdo con sus características personales. Sin embargo, no todos los roles que aparecen sirven a una tarea positiva, como por ejemplo el chivo emisario y el líder saboteador. Estas consideraciones nos llevan a una clasificación de los roles en términos de su funcionalidad u operatividad.

Clasificación.- A grandes rasgos, Pichon Rivière clasifica los roles de acuerdo a su operatividad, en términos de si están o no al servicio de la tarea grupal. Sus diferencias son las siguientes:
a) Los roles deben ser complementarios para que sean funcionales y operativos. Cuando aparece la suplementariedad, invade al grupo la competencia, que esteriliza la tarea (ver Complementariedad). Sin embargo, en otros artículos Pichon Rivière sugiere que tanto los roles complementarios como los suplementarios son funcionales y operativos, como cuando indica que los roles se hacen funcionales cuando «siguen una dinámica que sigue las leyes de complementariedad y suplementariedad», o cuando señala que la funcionalidad de los roles está «caracterizada por una plasticidad que permite asumir roles complementarios y suplementarios».
b) Los roles funcionales son aquellos que están al servicio de la tarea grupal, mientras que los no funcionales están al servicio de la pretarea. No obstante, si consideramos un sentido más amplio de funcionalidad, en rigor todo rol es funcional porque está al servicio de algo, sea la tarea o la pretarea. En el texto de Pichon Rivière predomina el sentido de rol funcional como sinónimo de rol al servicio de la tarea.
c) Los roles funcionales y operativos son rotativos o intercambiables, mientras que los no funcionales son rígidos. Rigidez significa dificultad o imposibilidad para que un integrante del grupo pueda asumir roles diferentes, según la ocasión. Rotatividad significa, al contrario, plasticidad, capacidad para asumir roles diferentes. En un grupo operativo, «cada miembro tienen asignado un rol específico, pero con un grado de plasticidad tal, que le permite asumir otros roles funcionales». Un grupo estereotipado puede en determinado momento adquirir plasticidad y movilidad a través de la tarea, cuando «los roles se hacen intercambiables y el grupo se vuelve operativo, se realimenta y encara la toma de decisiones».
La rotatividad de los roles puede verse por ejemplo en aquellos casos donde hay roles que se asumen en situaciones de emergencia, como un padre que tiene que asumir, en determinado momento, roles maternos. «Esta capacidad de asunción de roles (potencial de reemplazo en la emergencia) constituye un elemento a considerar para el pronóstico del grupo familiar. En el asumir roles necesitados situacionalmente se configura un proceso de aprendizaje de la realidad, tarea fundamental del grupo».
d) Los roles funcionales están relacionados con la salud, y los no funcionales con la enfermedad. «En un grupo sano, verdaderamente operativo, cada sujeto conoce y desempeña su rol específico, de acuerdo con las leyes de la complementariedad». En este punto, Pichon Rivière insiste en el concepto de aprendizaje del rol en el grupo primario, porque las fallas en la instrumentación (rol) generan en el sujeto un sentimiento de inseguridad que lo predispone a caer en una situación neurótica. El aprendizaje ha sido perturbado porque el sujeto… se ha hecho cargo de las ansiedades del grupo, configurándose la situación de chivo emisario». Así, «en cierta medida podemos considerar a las neurosis o a las psicosis como una perturbación del aprendizaje de la realidad a través de roles».