Diccionario de psicología, letra R, reacción terapéutica negativa

Reacción terapéutica negativa
Al: negative therapeutische Reaktion.
Fr.: réaction thérapeutique négative.
Ing.: negative therapeutic reaction.
It.: reazione terapeutica negativa.
Por.: reação terapéutica negativa.
Fenómeno observado en algunas curas psicoanalíticas y que constituye un tipo de resistencia a la curación singularmente difícil de vencer: cada vez que cabría esperar, del progreso del análisis, una mejoría, tiene lugar una agravación, como si ciertos individuos prefirieran el sufrimiento a la curación. Freud atribuye este fenómeno a un sentimiento de culpabilidad
inconsciente inherente a ciertas estructuras masoquistas.
En El yo y el ello (Das Ich und das Es, 1923) Freud dio la descripción y el análisis más completos de la reacción terapéutica negativa. En algunos pacientes «[…] toda resolución parcial que debería tener como consecuencia (y la tiene realmente en otros) una mejoría o una desaparición pasajera de los síntomas, provoca en ellos un aumento momentáneo de su sufrimiento; su estado se agrava durante el tratamiento, en lugar de mejorar».
Ya anteriormente, por ejemplo, en Recuerdo, repetición y trabajo (Erinnern, Wiederholen und
Durcharbeiten, 1914), Freud habia Ilamado la atención acerca del problema de «la agravación
durante el tratamiento». La proliferación de los síntomas puede explicarse por el retorno de lo
reprimido, lo cual viene favorecido por una actitud más tolerante respecto a la neurosis, o
también por el deseo del paciente de demostrar al analista los peligros del tratamiento.
En Historia de una neurosis infantil (Aus der Geschichte einer infantilen Neurose, 1918) Freud
habla también de «reacciones negativas»:
«Cada vez que se había resuelto radicalmente un síntoma, él [el hombre de los lobos] intentaba
negar por un momento el efecto mediante una agravación del síntoma»; pero sólo en El yo y el
ello se propone una teoría más específica. Conviene distinguir entre la reacción terapéutica
negativa y otras formas de resistencia que podrían ser invocadas para explicar aquélla:
viscosidad de la libido, es decir, una particular dificultad para el sujeto de renunciar a sus
fijaciones, transferencia negativa, deseo de demostrar su propia superioridad frente al analista,
«inaccesibilidad narcisista», de algunos casos graves, e incluso beneficio de la enfermedad.
Según Freud se trata de una reacción invertida, prefiriendo el paciente, en cada etapa del
análisis, la persistencia del sufrimiento a la curación. Freud ve en ella la expresión de un
sentimiento de culpabilidad inconsciente muy difícil de sacar a luz: «[…] este sentimiento de
culpabilidad es mudo para el enfermo, no le dice que es culpable, el sujeto no se siente culpable,
sino enfermo».
Freud vuelve a ocuparse de esta cuestión en El Problema económico del masoquismo (Das ökonomische Problem des Masochismus, 1924): si, a propósito de la reacción terapéutica
negativa, es posible hablar de un beneficio de la enfermedad, ello se debe a que el masoquista
encuentra su satisfacción en el sufrimiento e intenta mantener a cualquier precio «cierto grado
de sufrimiento».
¿Es posible considerar la reacción terapéutica negativa como el efecto de una resistencia del
superyó? Tal parece ser la opinión de Freud, por lo menos en los casos en que se aprecia, en el
sentimiento de culpabilidad, algo « […] tomado, es decir, el resultado de la identificación con otra
persona que previamente había sido objeto de una catexis erótica». En Inhibición, síntoma y
angustia (Hemmung, Symptom und Angst, 1926), Freud alude a la reacción terapéutica negativa
cuando invoca la resistencia del superyó.
Sin embargo, desde el comienzo Freud reservó un lugar para algo que no siempre es reductible
al papel del superyó y del masoquismo secundario, idea que encuentra su más clara expresión
en Análisis terminable e interminable (Die endliche und die unendliche Analyse, 1937), donde
la reacción terapéutica negativa se pone directamente en relación con la pulsión de muerte
(véase este término). Los efectos de ésta no se podrían localizar totalmente en el conflicto del
yo con el superyó (sentimiento de culpabilidad, necesidad de castigo); esto sería sólo «[…] la
parte que, por así decirlo, está ligada psíquicamente por el superyó y de este modo se vuelve
reconocible; otras cantidades de la misma fuerza pueden actuar, no se sabe dónde, en forma
libre o ligada». El hecho de que la reacción terapéutica negativa no pueda en ocasiones ser
superada ni incluso interpretada adecuadamente se explicaría porque su motivo último se hallaría
en el carácter radical de la pulsión de muerte.
Como se ve, la expresión «reacción terapéutica negativa» designa, por lo menos en la intención
de Freud, un fenómeno clínico específico en el cual la resistencia a la curación no puede
explicarse por los conceptos habitualmente invocados. Su carácter paradójico, irreductible al
funcionamiento (tan complejo como se lo suponga) del principio de placer, fue uno de los motivos
que condujo a Freud a la hipótesis del masoquismo primario (véase: Masoquismo).
Con todo, los psicoanalistas utilizan a menudo la expresión «reacción terapéutica negativa» de
forma más descriptiva y en un sentido menos limitado, para designar toda forma particularmente
intensa de resistencia al cambio en la cura.