Diccionario de Psicología, letra G, Grandes controversias (controversial discussions)

Diccionario de Psicología, letra G, Grandes controversias (controversial discussions)

Se ha denominado Grandes Controversias o Controversial Discussions a un episodio del movimiento psicoanalítico inglés que se desarrolló en Londres entre noviembre de 1940 y febrero de 1944, en cuyo transcurso, a lo largo de prolongadas discusiones, se opusieron los freudianos dc todas las tendencias reunidos en Gran Bretaña en el seno de la British Psychoanalytical Society (BPS). Después de la destrucción por el nazismo de las sociedades psicoanalíticas del Continente, la BPS se convirtió en el último bastión del psicoanálisis en Europa. Entre 1933 y 1939 acogió a numerosos inmigrantes, entre ellos los vieneses, y particularmente la familia Freud. Ahora bien, desde 1926 la escuela vienesa (y sobre todo los partidarios de Anna Freud) se oponían a Melanie Klein y su grupo, que representaban la corriente mayoritaria de la escuela inglesa. Partidarios de una concepción llamada ortodoxa (o continental) del psicoanálisis, , los annafreudianos pretendían ser los voceros de la tradición del padre fundador: un freudismo clásico centrado en la primacía del patriarcado, el complejo de Edipo, las defensas y el clivaje del yo, la neurosis, y una práctica del psicoanálisis de niños ligada a la pedagogía. Frente a este freudismo, que ya se deslizaba hacia el annafreudismo, los freudianos llamados kleinianos eran los artífices de una clínica moderna de las relaciones de objeto, centrada en las psicosis y los trastornos narcisistas, en los fenómenos de regresión, las relaciones arcaicas e inconscientes con la madre, y la exploración del estadio preedípico. Pero las Controversias no opusieron sólo al kleinismo y al annafreudismo. También pusieron en escena un asunto de familia. Hija de Melanie Klein, y analizada en su infancia por la madre, Melitta Schmideberg había emprendido el combate contra su progenitora antes de la llegada de los vieneses a Londres, respaldada entonces por Edward Glover, uno de los fundadores de la BPS. A la vez conservador y no conformista, Glover, contra el annafreudismo y el kleinismo, defendía «otro» freudismo: el de la primera generación inglesa, que iba a zozobrar con la guerra. Las Grandes Controversias se iniciaron cuando los miembros de la comunidad psicoanalítica reunidos en la BPS tomaron conciencia del cambio que tenía lugar en el país. Puesto que la guerra iba a dar origen a un mundo diferente del que ellos habían conocido, se impuso la necesidad de hacer estallar los conflictos teóricos y clínicos entre los diversos grupos. En consecuencia, se creó un comité para examinar las cuestiones de la formación (training committee). Ya entonces emergió otra tendencia, que se definió como el middle group. Ella reunía a los grandes clínicos de la segunda generación inglesa (Donald Woods Winnicott, John Bowlby), que aceptaban a la vez el freudismo y el kleinismo, pero se negaban a plegarse a ningún dogma. Los acompañaba un «antiguo», James Strachey, analizado por Freud y proveniente de la tradición literaria de los victorianos del Bloornsbury. Hasta el fin, Strachey encarnaría las virtudes de un justo medio, preocupado por la estética e inconformista. Otros clínicos de la misma generación se alineaban en esa tendencia: Ella Sharpe, Silvya Payne (1880-1976), Marjorie Brierley (1893-1984). Primero kleiniano, John Rickman, reformador de la psiquiatría inglesa, apoyó después al middle group, antes de ser violentamente atacado por Glover. En esta otra controversia se oponían también dos concepciones del psicoanálisis: una (la de Glover) rebelde a toda psicologización del freudismo, y la otra (la de Rickman) proveniente del pragmatismo adaptativo, llevaría, es preciso decirlo, a algunas aberraciones. Ernest Jones, el padre fundador de la escuela inglesa, controlaba la situación, a veces ausentándose de los debates, a veces organizándolos con paciencia y equidad. Partidario de un compromiso, fue él quien, contra la opinión de Sigmund Freud, favoreció la llegada de Malenie Klein a Londres. Pero, cercano a Anna Freud, encarnaba con ella la legitimidad familiar, mientras trataba de salvaguardar el poder de los ingleses, que corrían el riesgo de ser desbordados por la expansión de las corrientes norteamericanas. Durante cuatro años, las Controversias desgarraron la BPS. La escisión se evitó por un pelo, al precio de la denuncia espectacular de Glover, la emigración de Melitta Schmideberg a los Estados Unidos, y la renuncia de Anna Freud al training committee. El grupo británico se organizó entonces alrededor del reconocimiento oficial de tres tendencias: los annafreudianos, los kleinianos y los Independientes (ex middle group). De modo que la BPS tomó el partido de conservar una fachada de unidad para preservar la pertenencia común a la IPA , que garantizaba la internacionalización de las diversas corrientes. En noviembre de 1946 se firmó un compromiso que establecía dos tipos de formación: una rama A, mayoritaria, agrupaba a los kleinianos y los Independientes; una rama B reunía a los annafreudiamos. En realidad, se trataba de una victoria de los kleinianos: el poder volvió de facto a quienes dirigían la BPS antes de la llegada de los vieneses. Compiladas y publicadas en 1991 por Pearl King y Riccardo Steiner, las Grandes Controversias constituyen uno de los documentos de archivo más apasionantes de la historia del freudismo.