DILEMAS ÉTICOS DEL PSICÓLOGO EDUCATIVO: ANTECEDENTES TEÓRICOS

DILEMAS ÉTICOS DEL PSICÓLOGO EDUCATIVO: ESTUDIO DE CASOS CON
SIETE PSICÓLOGOS EDUCATIVOS DEL VALLE DE ABURRÁ EN EL AÑO
2010

YURLEY ALEXANDRA ESTRADA RESTREPO
YULIANA MURIEL DEOSSA
LEIDY TATIANA SUÁREZ LOPERA

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2.3 ANTECEDENTES TEÓRICOS
2.3.1 Representaciones sociales
¿Qué son las representaciones sociales?
Según Moscovici las representaciones sociales difieren de la representación
colectiva por ende de un carácter más dinámico30. En escritos sobre
representaciones sociales se tiende a relacionar dicho concepto y definición de
Moscovici no sólo como un producto mental sino que además como una
construcción simbólica que se genera gracias a las mismas interacciones sociales
que con el pasar de las años y a medida que cada sujeto es inmerso en los
diferentes grupos sociales (la familia, la escuela, etc.) adquiere habilidades y
conocimientos sobre lo que rodea, además de que obtiene más capacidad para
nombrar, clasificar, explicar, evaluar gran variedad de significados y objetos
sociales; finalmente esto termina siendo entonces, la representación social que
cada sujeto logra tener del medio en el cual está vinculado.
Según Jodelet:
“representar es hacer un equivalente, pero no en el sentido de una
equivalencia fotográfica sino que, un objeto se representa cuando está
mediado por una figura. Y es sólo en esta condición que emerge la
representación y el contenido correspondiente”31.
De acuerdo con lo anterior las representaciones sociales son un legado social
transmitido generacionalmente con transformaciones culturales y sociales de la
época.
¿Cómo se forman las representaciones sociales?
Cuando se hace investigación sobre algún tema determinado por lo general se
acude a realizar entrevistas a personas que directa o indirectamente están
vinculadas con el tema, con el propósito de hacer un análisis más detallado de la
investigación a partir de los aportes y experiencia de los participantes; siendo el
resultado de las relaciones sociales las cuales están dotadas de una cantidad de
creencias e ideas propias de la cultura a la que pertenecen y se identifican, como
lo indica Araya Umaña:
Emprender estudios acerca de la representación de un objeto social
VIH/SIDA; relaciones entre mujeres y hombres, por ejemplo permite reconocer
los modos y procesos de constitución del pensamiento social, por medio del
cual las personas construyen y son construidas por la realidad social. Pero
además, nos aproxima a la “visión de mundo” que las personas o grupos
tienen, pues el conocimiento del sentido común es el que la gente utiliza para
actuar o tomar posición ante los distintos objetos sociales.32
Gracias a las capacidades cognitivas del hombre, es que las
representaciones sociales empiezan a cobrar valor, ya que el medio social
hace que el hombre empiece a pensar en sí mismo y en su medio. “En
realidad, las RS son estructuras simbólicas que se originan tanto en la
capacidad creativa del psiquismo humano como en las fronteras que
impone la vida social (Guareschi yJovchelovitch,1995).33
Teniendo en cuenta todo lo anterior puede decirse que el medio social y
cultural al que pertenecen hacen que las representaciones sociales tomen
valor en cada sujeto pues bien se construyen desde las mismas creencias
y normas del sistema con el cual se identifican, que de una u otra forma
siempre influirán en la forma de ser de cada persona y percepción del
medio en el cual se circunscribe34
Es de resaltar que la existencia de los medios de comunicación y diferentes
eventos sociales (obras de teatro, cine, entre otros), constantemente hacen
eco de las representaciones sociales; y son estas interacciones y vínculos
lo que convierte a las representaciones en un estereotipo social, que
durante la interacción con otro u otros durante el desarrollo evolutivo
continúan perpetuando, se puede decir entonces que es gracias a la
comunicación social que el ser humano es dotado de representaciones que
influyen de manera directa en su experiencia personal.
– Función de las representaciones sociales
Si bien las representaciones sociales se forman a partir de la interacción con la
sociedad por medio de lo que comunicamos, se termina entonces transmitiendo al
otro un mensaje dotado de significados que cada persona ira constituyendo,
según Sandoval (1997) conllevan a cuatro funciones:
• La comprensión, función que posibilita pensar el mundo y sus relaciones.
• La valoración, que permite calificar o enjuiciar hechos.
• La comunicación, a partir de la cual las personas interactúan mediante la
creación y recreación de las representaciones sociales.
• La actuación, que está condicionada por las representaciones sociales.35
La representaciones sociales van determinando cuanto se sabe de nosotros
mismos y de lo que nos rodea más específicamente de la sociedad, ello permite
crear juicios de valor y criterios frente a lo que acontece en el mundo tanto interno
como externo, se llega interpretar el mensaje que es transmitido por el otro,
logrando así generar canales de comunicación, la cual hará que se continúe
afianzando y adquiriendo mas conocimiento y aptitud social.
De acuerdo con el planteamiento de Dos Santos Bruel:
Los seres humanos tenemos la posibilidad de comprender, crear sentido,
actuar, controlar, identificar y resolver los problemas que se nos plantean en el
mundo social a través de las relaciones establecidas en el contexto. Y
tenemos algo más: la posibilidad de convertirnos en entidades psicológicas,
de convertirnos en personas en el sentido psicológico del término: ‘los
acontecimientos psicológicos a los que llamamos sociales son, en un sentido
preeminente, relacionales’36
Las representaciones sociales terminan siendo aquellas que recreen los
significados sociales, a través del mismo medio social en el cual estamos
inmersos, posibilitando un mejor desarrollo cognitivo y social.
2.3.2 Conceptualización de términos
– Representación social
Se representa como una noción que «… antes que nada concierne a la manera en
que nosotros, sujetos sociales, aprendemos los acontecimientos de la vida diaria,
las características de nuestro ambiente, las informaciones que en él circulan,
identificamos a las personas de nuestro entorno próximo o lejano…”37, eso
evidenciándose en el quehacer profesional de los psicólogos educativos.
– Ética
La ética ha sido definida por diversos autores, en estos conceptos se resalta
como el comportamiento y la conducta del hombre frente a los demás hacen parte
de este tema; existen unas normas que procuran una convivencia con el otro, con
base al respeto; a continuación se mencionan diversas definiciones de este
concepto.
La Ética, como criterio de orientación de la acción humana y de inspiración de
la vida social, como filosofía de la actividad consciente, con valores como
honor, honestidad, deber, responsabilidad y obligación de conciencia, cuando
está referida a una profesión se conoce como Ética Profesional y, por
pertenecer al ámbito de la obligación moral, se inscribe entre las normas de
carácter deontológicas (del griego deón= deber).38
La ética trata entonces, del comportamiento, la conducta y el actuar de
hombre; es, aquella instancia desde la cual se juzga y valora la forma como se
comporta el hombre y, al mismo tiempo, la instancia desde la cual se formulan
los principios y criterios acerca de cómo debe ser el comportamiento y hacia
dónde dirigir las acciones.39
La moral como lo define Paul Faulquié: «…es la teoría razonada del bien y del
mal»40. Por ello puede considerarse que la moral, es aquella que indica cuales son
los actos correctos o incorrectos del ser humano; mostrándose entonces que tanto
ética como moral hacen alusión a lo que debe o no hacerse, lo bueno o lo malo.
– Deontología
Un concepto fundamental para este trabajo es la deontología que es la
teoría que habla sobre la ética profesional; en el caso de este trabajo la
ética profesional del psicólogo.
Esta teoría propone ciertos valores y normas que debe tener presente un
profesional en el desempeño de su práctica.
Una definición de este concepto la da Omar Franca Tarragó:
“…la deontología se ocupa de los deberes profesionales; implica que la
perspectiva que se adopta para la reflexión es la que surge de un polo de la
relación: el profesional”.41
A continuación se encuentra otra definición que pone explícito que esta teoría
ética propone unas normas y reglas que se deben aplicar a los campos de acción
de los profesionales
“El deontologicismo o teoría deontológica la podemos considerar como una teoría
ética que se ocupa de regular los deberes, traduciéndolos en preceptos, normas
morales y reglas de conducta, dejando fuera de su ámbito específico de interés
otros aspectos de la moral.”42
– Bioética
Los avances médicos han llevado a la creación de dilemas o discusiones
que hacen parte de la ética, casos como el aborto, la clonación de
animales, y la muerte asistida, que promueven debates entre las personas
que aprueban y rechazan las premisas de estas acciones; la bioética
estudia las acciones de los seres humanos en estos casos, y realiza
planteamientos sobre el actuar de las personas; a continuación se
encuentra una definición dada por la Encyclopedia of Bioethics:
“…define la bioética como «el estudio sistemático de la conducta humana
en el área de las ciencias de la vida y del cuidado sanitario, en cuanto
que tal conducta se examina a la luz de los valores y de los principios
morales». En la actualidad abarca no sólo los aspectos tradicionales de
la ética médica, sino que incluye la ética ambiental, con los debates
sobre los derechos de las futuras generaciones, desarrollo sostenible,
etc.”43
Es importante puntualizar en la definición de los anteriores términos, por la
similitud de su significado y de esta manera evitar confusión respecto al tema.
– Principios éticos
Un principio ético es un imperativo categórico justificable por la razón humana
como válido para todo tiempo y espacio. Son orientaciones o guías para que la
razón humana pueda saber cómo se puede concretar el valor ético último: la
dignidad de la persona humana.
Afirmar que «toda persona debe ser respetada en su autonomía» es formular un
Principio que concretiza, en el campo de las decisiones libres, lo que significa
defender que la «Persona humana» es el valor supremo; y a su vez, hace de
fundamento para la norma categorial de «no matar al inocente» o de «no mentir».
Cuando se asienta el principio de que «toda persona es digna de respeto en su
autonomía» se está diciendo que ése es un imperativo ético para todo hombre en
cualquier circunstancia; no porque lo imponga la autoridad, sino porque la razón
humana lo percibe como evidentemente válido en sí mismo.
Creer que una persona pueda no ser considerada digna de respeto parecería
contradictorio con el valor libertad, tan esencial en la naturaleza humana. Se
enuncian tres principios morales fundamentales: Autonomía, Beneficencia y
Justicia, que mas adelante serán profundizados.
Indudablemente, los principios éticos básicos son formales, su contenido es
general: «debemos hacer el bien», «debemos respetar la libertad de los demás»,
«debemos ser justos», etc. Pero los principios no nos permiten saber cómo
debemos practicarlos en una determinada circunstancia.44
– Normas éticas
Las normas morales son aquellas prescripciones que establecen qué acciones de
una cierta clase deben o no deben hacerse para concretar los Principios Éticos
básicos en la realidad práctica. Las normas éticas pueden ser de carácter
fundamental o de carácter particular. En la práctica profesional hay tres normas
éticas básicas en toda relación con los clientes: veracidad, fidelidad a los
acuerdos o promesas, y confidencialidad, sobre las que más abajo se enfatizará.
También las normas son, en cierta manera, formales, pero su contenido es mucho
mayor que el de los principios. En ese sentido el deber de decir la verdad es
mucho más fácil de saber cuándo se cumple o no, que el deber de «Respetar la
Autonomía de las personas». Lo mismo se puede decir con respecto al hecho de
guardar o no una promesa o un secretosecreto.45
– Psicología educativa
La psicología educativa se desarrolla en el ámbito escolar, teniendo como
propósito el estudio e intervención del ser humano en este campo; por ende como
lo indica Pastor Hernández:
“…el objetivo principal de la Psicología educativa es entender la enseñanza y
el aprendizaje, y la investigación es un instrumento fundamental. Los
psicólogos educativos diseñan y conducen muchos tipos diferentes de
estudios de investigación en su intento por comprender la enseñanza y el
aprendizaje”.46
Por lo anterior cabe anotar que el rol del psicólogo educativo está orientado a
todos los estamentos pertenecientes a la institución educativa a la cual está
vinculado; desarrollando proyectos educativos tanto en el ámbito individual como
colectivo, contribuyendo a la sana convivencia y salud mental institucional.
2.3.3. Dilemas éticos del psicólogo educativo
El ejercicio profesional de los psicólogos en las instituciones trae problemáticas
que pueden crear situaciones que conlleven a dilemas éticos a la hora de
intervenir en los diferentes casos; por ello para hablar de ética se debe referenciar
los problemas o los dilemas que tienen los psicólogos educativos en las
instituciones donde ejercen o han ejercido esta profesión.
Por lo tanto es importante mencionar los tres principales dilemas éticos del
psicólogo en medios educativos47; el primer dilema ético es la etiquetación
psicológica y estigmatización; este puede tener una gran repercusión a nivel
psicoafectivo en los alumnos, por el uso indebido de las pruebas psicotécnicas o
test, donde en ocasiones pueden medirse a las personas solo a nivel objetivo las
diferentes capacidades y habilidades, dejando a un lado las características
subjetivas, repercutiendo de manera negativa en los diversos informes y registros
que las instituciones educativas les piden a los psicólogos sobre las personas que
han sido intervenidas o evaluadas; sin embargo este es un problema tanto en el
espacio institucional como en la parte ética, donde se debe tener muy claro lo que
es un registro clínico-psicológico y lo que es un registro académico, porque ambos
presentan diferencias muy marcadas; en el primero, el psicólogo debe tener en
cuenta los acuerdos que se realizaron con el niño o adolescentes acerca del
conocimiento de la información, si se acordó dar a conocer los resultados o no;
mientras que en el segundo, son reportes académicos que puede conocer el
personal de la institución y que es sólo de carácter académico donde no se ve
implicada la transferencia de una persona con el psicólogo por qué no se trata de
un proceso terapéutico.
El segundo dilema mencionado por Franca Tarragó es el deber de la
confidencialidad; donde este expresa; “otro punto éticamente cuestionable es el
conflicto entre mantener la confidencialidad con el adolescente y el informe a los
padres”48 esta problemática no sólo es con los padres de familia, si no con las
mismas instituciones, ya que en muchas de ellas exigen informes detallados y
específicos de alguno de los pacientes que han sido evaluados por psicología, y
donde el profesional desde su práctica debe estar muy pendiente de contar con el
consentimiento de su paciente y ser reiterativo con no dar a conocer la
información, ya que se trata de una “propiedad compartida” como indica el autor,
una información perteneciente a dos partes y que ambos son conscientes y libres
de ello.
El tercer dilema que expone Tarragó49 es Ética y opciones pedagógica; como lo
manifiesta el autor “se da una última área de conflicto entre técnica psicológica y
ética cuando el psicólogo educacional intenta crear en los alumnos, determinados
hábitos de pensamientos, sentimiento o conducta”; por ello no pretender ni inducir
comportamientos que beneficien al personal académico y disciplinario de la
institución, ni a los padres de familia o a los alumnos en especifico, ya que el
psicólogo en las instituciones debe procurar promover la singularidad, la
subjetividad y la responsabilidad de cada sujeto, no intentando crear pautas de
medición entre los estudiantes, ya que cada uno se presenta como un caso en
particular y del cual existen factores y personas externas que están involucradas
dentro de su queja dirigida a otro y la demanda hacia la pregunta por el sí mismo.
De igual forma existen situaciones en las que el psicólogo educativo puede
enfrentar un dilema ético subyacente a los tres principales, ya que al tratarse de
situaciones en las que el paciente esta delinquiendo o consumiendo drogas
psicoactivas, y los padres no están enterados, el profesional debe tener en
consideración la ética en la asistencia a menores y adolescentes, donde también
se rige por la ley 1098 de 2006 de Infancia y Adolescencia, donde a pesar de que
existe la norma de confidencialidad, se debe tener en cuenta que se trata de un
menor y que las secuelas físicas y psicológicas también dependen del
acompañamiento que los padres puedan brindarle a sus hijos, además que la ley
los protege por tratarse de un caso especial y que podría poner en peligro al
menor si guarda silencio.
A partir de lo anterior es fundamental mencionar los tres principales dilemas éticos
del psicólogo en el campo educativo, ya que todos aunque diferentes en su
conceptualización, determinan las problemáticas o dilemas éticos en el ámbito
escolar; dentro de ellos se ven reflejado los tres principios éticos y las tres normas
éticas, ya que los principios como la beneficencia, la autonomía y la justicia hacen
parte en el proceso terapéutico, donde se busca el bienestar del paciente en las
diversas intervenciones, también se procura que el paciente sea libre y autónomo
de expresar lo que desea y lo que siente, y la justicia, para atender a la población
en general no importando las condiciones socioeconómicas, ideológicas y/o
culturales; aunque muchas veces las instituciones buscan homogenizar a los
estudiantes para poder medir sus cualidades haciendo comparaciones y creando
jerarquías, mientras que la heterogeneidad se queda como un concepto aislado
que sólo sirve para mirar distinto a los demás y en ocasiones dejando de lado la
individualidad.
Con las normas éticas pasa exactamente lo mismo, ya que cuando se habla de
confidencialidad, de veracidad, y de fidelidad a las promesas, muchas veces se
debe pasar por alto algunas de ellas en casos muy específicos y especiales que
merecen el rigor ético y profesional del caso, del mismo modo el deber del
psicólogo es lograr acuerdos con el paciente acerca de la confidencialidad de la
información y la misma quedará bajo secreto profesional, igual el psicólogo debe
estar consciente que existen algunas situaciones que por ley le corresponde dar a
conocer y que el tribunal ético estaría dispuesto a tolerar.
Las instituciones se aprovechan de la práctica psicología para utilizar al psicólogo
como un medio de diagnóstico y refuerzo de la patología institucional, y también
como un mecanismo regulador y transformador que cambien ciertas conductas
que para las instituciones no son adaptativas; cuando se trata es de un problema
singular donde la subjetividad juega un gran papel y muchas veces no se dan
cuenta que los menores son el síntoma de una relación parental que simplemente
no funciona o que presenta dificultades y mientras los padres no se quieran hacer
cargo de esa situación su hijo será la extensión de ese síntoma relacional en la
pareja.
2.3.4 Experiencia subjetiva
– ¿Qué es subjetividad?
El termino subjetividad es tan amplio y tan complejo como la definición misma,
como lo indican las diversas investigaciones y hasta los diccionarios más
especializados; por lo general el origen de la palabra subjetividad proviene de las
teorías filosóficas y donde se define es desde el subjetivismo no incluyendo la
subjetividad; por el origen filosófico de la palabra subjetivismo, es importante
conocer cuáles son los momentos cruciales y determinantes para lograr la
construcción que algunos autores se han querido arriesgar a dar su significado;
por ejemplo el diccionario de filosofía Abbagnano lo define de la siguiente forma:
“1) El carácter de todos los fenómenos psíquicos, en cuanto fenómenos de
conciencia, o sea tales que el sujeto los refiere a sí mismo y los llama “míos”. 2)
Carácter de lo subjetivo en el sentido de ser aparente, ilusorio o deficiente”50.
Este concepto tomado del diccionario de filosofía, manifiesta que todos los
fenómenos psíquicos de los cuales el sujeto tiene conciencia son propios o en sus
palabras que son “míos” o sea del sujeto, con ello queriendo decir que nadie
puede dar cuenta de lo que puede pasar psíquicamente en un individuo, ya que
todo gira en torno al carácter subjetivo que cada sujeto posee.
Igualmente, se encuentran autores que apoyan esta definición desde el campo
de la filosofía, Mora lo expone de la siguiente manera:
La definición más general que puede darse de “subjetivismo” es: la acción y
efecto de tomar el punto de vista del sujeto. El sujeto puede entenderse como
un sujeto individual, como el sujeto humano en general o como el sujeto
trascendental en sentido kantiano. En este último caso no puede hablarse
de subjetivismo porque, porque el sujeto trascendental es el conjunto de
condiciones que hacen posible el conocimiento para cualquier sujeto
cognoscente y, en último término, el conjunto de condiciones que hacen
posible todo conocimiento, aunque no sea formulado por un sujeto concreto.51
Con lo anterior se complementan las dos definiciones planteadas, ya que desde el
punto de vista investigativo y teórico, el término subjetividad o subjetivismo, está
definido a partir de la individualidad y el punto de vista de un sujeto, no se trata de
la influencia externa o de la participación de otros individuos, sino lo contrario se
trata de un conocimiento y de las acciones de un sujeto en particular lo que
constituye la subjetividad; que sólo se trata de lo que puede pensar, sentir y hacer
un sujeto, oponiéndose a la objetividad, donde todo depende de lo que podamos
observar o experimentar, eso es algo imposible en la subjetividad, ya que ninguna
persona podrá saber qué es lo que el otro desea, piensa y siente, porque no es un
factor objetivo.
Una de las condiciones donde se manifiesta la conceptualización de la
subjetividad, es en la comparación teórica que se hace a partir de la razón y de
los sentidos, donde autores como Descartes y hasta Kant hacen referencia, el
primero indica que solo la razón es fuente de conocimiento, por que los sentidos
nos pueden engañar, pero Kant refuta este enunciado al decir que:
“La razón de un sujeto que debe conocer a un objeto (un perro, un astro del cielo
o su suegra) tiene una condición de sensibilidad. Es decir yo, el sujeto, quiero
ejemplo el espacio y el tiempo, que son previos al conocimiento de la mesa, son
la condición de posibilidad de la existencia de la mesa”52.
Por lo tanto Kant en su ejemplo, describe como los sentidos hacen parte de la
condición humana y donde sólo la subjetividad se puede ver manifiesta, ya que
todos los individuos sentimos y percibimos los objetos de forma diferente y
particular.
– Experiencia y emociones
Según la revisión documental, las emociones y la experiencia son dos términos
que están estrechamente ligados; porque al hablar de la experiencia humana se
debe también hacer referencia a lo que conlleva esa experiencia y lo que implica,
que son las emociones que los sujetos le dan a las situaciones; por lo tanto para
definir estos dos conceptos se empezará por hacer por separado y luego la
relación de los mismos.
Según el diccionario de psicología, la emoción es:
La emoción se identifica a veces con sentimiento o con afectos. La conducta
emocional va ligada según Duffy a una excitación del proceso orgánico global
de descarga de energía, mientras que Lindsley considera la activación por
emoción como un proceso fisiológico del cerebro. Con excitación alta hay
emoción desorientadora que lleva a focalización selectiva de la atención y la
interferencia de reacciones irrelevantes.53
En el Diccionario Akal de Psicología, la experiencia se define como uno de los
sentidos corrientes, retomado entre sus conceptos centrales por varias escuelas
de filosofía y de psicología (en particular en las corrientes fenomenológica y
humanista), el término designa lo que el sujeto percibe, siente, piensa en sus
relaciones con el mundo que le rodea y consigo mismo, y de un mundo
irreductiblemente subjetivo. Este sentido se precisa a menudo recurriendo a la
expresión “experiencia vivida” o al término próximo “lo vivido”. La experiencia no
se confunde necesariamente con los contenidos de la introspección, ni de la
conciencia explícita y no es necesariamente expresable verbalmente.
Remite generalmente al flujo temporal de los acontecimientos y de las impresiones
que están ligados a ellos, pero también puede poner el acento sobre el desenlace,
en un momento de la vida del sujeto., del conjunto de sus experiencias pasadas
(acepción que llega a otros de los sentidos corrientes del término que se refiere a
la riqueza del saber y de la sabiduría acumulados por un ser en el transcurso de
su existencia)54.
En otra acepción corriente, retomada esta vez por las filosofías empiristas; el
término designa el conjunto de las informaciones que recibe el organismo, a través
de sus sentidos, del universo que le rodea. Según la tradición empirista, todo
conocimiento se deriva de la experiencia así concebida y los cuadros formales de
la puesta en orden de la realidad no proceden de ideas innatas si no de la
experiencia sensible.55
Como se menciona anteriormente las emociones y la experiencia se relacionan de
manera significativa, ya que los sujetos no pueden desligar de una experiencia las
emociones que están inmersas en el propio sujeto y en la situación que está
llevando a cabo.
A continuación se hace referencia a la definición de experiencia desde Gadamer
en contraste con la de Hegel:
Para Gadamer, la experiencia no está mediada por el Espíritu Absoluto sino
por la tradición; lo que nos perturba no es la negación del concepto, sino la
conversación con un tú que me da la experiencia de mi finitud; el hilo
conductor no es la negación sino el carácter lingüístico de la comprensión. En
Hegel, la experiencia termina en el reposo del Espíritu; en Gadamer, la
experiencia no termina jamás sino que se abre de nuevo a nuevas
experiencias. La forma como asume Gadamer la dialéctica de Hegel le
permite, al mismo tiempo, separarse de él para construir el concepto de
diálogo como estructura abierta; esta apertura de la experiencia hegeliana
produjo muchas críticas a Gadamer. Mientras que en Hegel la experiencia
culmina en la identidad conciencia – objeto, Gadamer hace de esta
experiencia apertura constitutiva y no meramente provisional…56.
A partir de esta definición, los autores hacen referencia a la experiencia, Hegel
desde una experiencia que tiene culminación, mientras para Gadamer la
experiencias.
Estos dos conceptos se desarrollan entre sí, porque cada individuo experimenta
una emoción en particular, independiente de experiencias pasadas, ya que las
emociones están inmersas en las situaciones en particular que el individuo
experimenta.
De acuerdo con el documento de Eduardo S. Vila Merino “De la ética del discurso
al discurso de la educación”, se habla de la importancia de que la educación sea
democrática y en su reciprocidad, que la democracia sea educativa; y como lo
indica el autor “todo proceso democrático tiene un componente educativo
inherente a sus valores, virtudes y aspiraciones, pero al mismo tiempo demócratas
se aprende viviendo en democracia a través de principios procedimentales éticos
como los que nos proporciona la ética del discurso”57.
Por lo tanto, la ética se manifiesta en la democracia cuando en el espacio
educativo se establecen estrategias para resolver conflictos y tensiones que
pueden estar perjudicando a un individuo o a la comunidad estudiantil en general,
donde se puedan establecer la idea de construcción cultural y moral para aportar
al sostenimiento de la democracia misma, en este sentido “la democracia no es
algo alejado de las personas, no es una instancia meramente formal e
institucional, sino un estilo de vida legitimado por una norma basada en el diálogo,
la comunicación y el consenso58.»
Pero el entorno educativo debería proporcionar que las personas sean autónomas
y desarrollen una capacidad crítica para cuestionar e interrogar el mundo que les
rodea y poder socializar lo que piensan y sienten, no que se queden con una idea
creada y socializada por otros, si no que se pueda dar una re construcción o una
co-construcción que permita la transformación personal y colectiva además
apoyando la creación de una dinámica de la ética y la cultura proporcionando la
modificación y/o el reconocimiento de estas concepciones dentro de la
democracia.
Cuando se habla de democracia dentro de un contexto cultural, se debe tratar de
una concepción igualitaria y equitativa que permita que todos estén inmersos
dentro de este sistema y que los haga pertenecientes y participativos, como en la
educación que debe ser entendida como un derecho fundamental y absolutamente
imprescindible para toda persona, convirtiendo a las instituciones educativas en
instituciones de procesos dialógicos e inclusivos, como lo expresa Guttman:
¡Kuna educacion democratica deberia presentar a los estudiantes diversas
perspectivas y equiparlos para deliberar como ciudadanos igualitarios acerca
de por que y cuando resulta justificable acordar el desacuerdo sobre una
cuestion (como el culto religioso) y cuando es moralmente necesario decidir
colectivamente acerca de una politica individual sustantiva (como la no
discriminacion sexual y racial).59
Con lo anterior, se quiere apostar a una educacion donde los estereotipos y los
prejuicios que la sociedad contiene, no sean injustificados, sino que los individuos
tienen el derecho de saber y de expresar con que estan de acuerdo o no, para
presentar su opinion y ademas sustentar las representaciones sociales en las que
las personas son pertenecientes a una sociedad que no solo puede dar lugar para
participar, si no que ese lugar sea un espacio para el sujeto sustentando desde su
racionalidad, sino que sirva para la transformacion colectiva.
2.3.5 Estrategias de afrontamiento
„h Afrontamiento orientado a la tarea, a la emocion y a la evitacion
En cualquier proyecto de investigacion es importante presentar de manera
completa y concisa la teoria respectiva al estudio del mismo; en este caso es
esencial dar a conocer todo al respecto de las estrategias de afrontamiento; y
como algunos psicologos las emplean en situaciones complejas que representan
un gran dilema para ellos como profesionales.
Es importante definir estrategias de afrontamiento las cuales estan divididas
conceptualmente en tres partes: estrategias, tipos y estilos, esto depende del
autor y del tipo de investigacion realizada, por ello como lo indica Martin: «su
delimitacion conceptual es menos precisa debido a las diferentes etiquetas
verbales utilizadas, ya que su definicion ha estado unida al desarrollo de
instrumentos de medida de las mismas».60
La definicion de estrategias de afrontamiento es un poco compleja debido a la
delimitacion conceptual; ademas, para el fin investigativo que se tenga propuesto,
dependiendo del metodo y la metodologia investigativa requerida en el trabajo;
por ello inicialmente Lazarus y Folkman (1984), ofrecen una definicion mas del
lado cognitivo conductual para manejar las demandas especificas internas o
externas según sea el caso, luego Higgins y Endler (1995), agrupan las
estrategias en tres categorías principales como se mencionaba anteriormente,
orientados hacia la tarea, la evitación y hacia la emoción; la primera estrategia es
enfocada en el problema.
En las estrategias orientadas a la emoción, los esfuerzos se dirigen a modificar
las respuestas emocionales a los factores estresantes. Se trata de tomar medidas
directivas para alterar la situación, en si para reducir la cantidad de estrés que
evoca. También incluye los intentos de replantear el problema de tal manera que
ya no evoca una respuesta emocional negativa permitiendo menos tensión; el
afrontamiento orientado a evitar incluye estrategias tales como evitar la situación,
o perder la esperanza; también incluye el uso de los esfuerzos indirectos para
ajustarse a factores de estrés por el distanciamiento de uno mismo, evadiendo el
problema, o participando en actividades no relacionadas con el propósito de
reducir la sensación de estrés.
Sin embargo hay diferencias entre las tres estrategias mencionadas; las
orientadas hacia la evitación se caracterizan por la ausencia de los intentos de
alterar la situación, esto quiere decir que pueden tener un ajuste inadecuado por
que las estrategias orientadas hacia la tarea y hacia la emoción son estrategias
proactivas que refleja una mayor efectividad frente a auto percepción y menos
depresión.
En las diversas investigaciones se han encontrado factores internos y externos
influyentes en la forma cómo las personas utilizan las estrategias de
afrontamiento; los investigadores han hallado que la identidad étnica, cultural
incluso de nivel socioeconómico son características influenciadas en conductas
de afrontamiento.
Para finalizar es preciso tener en cuenta que la literatura y la teoría no brindan
una definición conceptual integral, pues depende de la situación para crear o
plantear una definición precisa de cada una de las estrategias, además se debe
tener en cuenta que la forma de afrontar de una persona está delimitada por la
subjetividad de cada individuo y la forma de reaccionar solo está determinada por
el sujeto, por lo tanto en una situación igual para todos, cada persona tendrá sus
propias estrategias para afrontarla.

Notas:
30 ALVARO, José Luis. Representaciones Sociales [en línea].<
www.margen.org/catedras/Representaciones%20sociales.doc > [Citado el 5 de octubre de 2010]
31 ARAYA UMAÑA, Sandra. Las representaciones sociales: Ejes teóricos para su discusión. 1ª ed; Costa
Rica: Producción Editorial Leonardo Villegas, 2002. 11p.
32 Ibíd., p.12
 RS: Representaciones Sociales
33 DOS SANTOS BRUEL, Teresa Cristina. Representaciones sociales de genero: un estudio psicosocial
acerca de lo masculino y lo femenino. Universidad autónoma de Madrid. 2008. 259 p.
34ARAYA UMAÑA, Sandra Op. Cit p
35 COSTAS, Mirtha. Representaciones sociales. [En línea]
<www.grupointervenciontransformadora.ecaths.com/…/Representaciones.Sociales.1295234635.doc> [Citado
el 24 de Agosto de 2010]
36 ASCH S. Psicología Social. En: DOS SANTOS BRUEL, Teresa. Op. Cit, p.14.
37 ZAMORA RAMÍREZ, María Elizabeth; El control subjetivo del proceso de trabajo. Las representaciones
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CORPORACIÓN UNIVERSITARIA LASALLISTA
FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES Y EDUCACIÓN
PROGRAMA DE PSICOLOGÍA
CALDAS, ANTIOQUIA
2011