Elección de objeto sexual de deseo e imagen corporal

En lo que respecta a su propio cuerpo el sujeto adolescente deberá realizar, con base en sus identificaciones primarias, una elección de objeto sexual de deseo, en otras palabras, el sujeto se convierte a si mismo en objeto capaz de cargarse con libido solo cuando ha podido cargar con libido a otro objeto. En el momento en el cual el adolescente es capaz de tener una pareja estable del sexo opuesto, por contraposición básica el podrá encarnar el papel del otro sexo.
El surgimiento de este esquema corporal sentido como propio para el sujeto es parte fundamental de su identidad. Solo cuando el sujeto adolescente ha podido aceptar plenamente su cuerpo con los cambios que este ha tenido y que seguirá teniendo y con las posibilidades que este le brinda desde lo sexual como el poder reproducirse accediendo a la genitalidad adulta podrá integrarlo como parte de si y a su vez de su identidad, viendo en este una vía de expresión y conocimiento en y al mundo.
La imagen corporal, parte de la identidad del sujeto, se logra a partir de lo relacional, es decir, solo partiendo de la imagen que los otros le devuelven al sujeto de si, este logrará estructurar su propia imagen. A su vez si desde los años infantiles el sujeto tiene personas a su alrededor que le devuelven imágenes positivas de si podrá crear una imagen de este tipo, si por el
contrario sus relaciones le reflejan imágenes negativas y poco satisfactorias la imagen que tenga de si podrá verse mas desvalorizada y poco positiva.