Entrenamiento en habilidades sociales (EHS)

La importancia de las habilidades sociales (HS), se reconoce en los años 30 (estudios centrados en la socialización infantil).
En los Años 60: Se realizan investigaciones sistemáticas, y la configuración del procedimiento de entrenamiento en habilidades sociales (EHS).
Hechos que contribuyen a esto:

1. Desarrollo de métodos para el aprendizaje de respuestas emocionales y sociales que permiten a los sujetos superar determinados problemas (Salter: técnicas de autoexpresión, Wolpe: entrenamiento de respuestas incompatibles, Skinner).

2. Realización de investigaciones sobre problemas psiquiátricos, en los que se establece una relación directa entre la competencia social de los pacientes y su sintomatología patológica, así como con su posterior proceso de rehabilitación.

3. La elaboración de un modelo teórico explicativo del funcionamiento de las HS, tomando como analogía el modelo ergonómico aplicado a destrezas motoras.

4. El desarrollo de los principios del aprendizaje social de Bandura.

Dos orientaciones de estudio e intervención:

1. Norteamericanos Caracterizados por el enfoque clínico, el empleo del entrenamiento asertivo, preocupación por cuestiones metodológicas, e interés por variables situacionales.

2. Europeos (grupo de Oxford) Enfoque psicosocial, empleo de EHS, preocupación teórica centrada en el modelo, e interés por el contexto situacional, social y cultural.

En los Años 70: Aparecen numerosos textos divulgativos de los EHS, y se desarrollan numerosas investigaciones centradas en su validación.
El interés de los especialistas, va variando progresivamente:
– Del tratamiento individual, al entrenamiento en grupo.
– Del tratamiento de casos clínicos al entrenamiento de otras conductas sociales problemáticas (alcoholismo, drogadicción).
– Desarrollo de programas centrados en la formación de habilidades de distintos profesionales.
– Variaciones en el enfoque: reconocimiento de la especificidad situacional de las HS e integración de habilidades y procedimientos cognitivos.

La efectividad de los EHS se hace incuestionable.
Razones que llevaron a la «conversión» de Goldstein: simplicidad, brevedad, versatilidad y amplitud de aplicaciones, sin limitación de problemas ni de clientes.
Otras razones: Mejora de la calidad de vida, ajuste social, reducción de la severidad de los síntomas y de la probabilidad de recaídas, evitación de situaciones estresantes.
La consideración de los EHS como métodos psicoeducativos, en lugar de terapéuticos, amplia sus horizontes.
Creciente interés por éstas técnicas en España.

BASES TEÓRICO-EXPERIMENTALES y APROXIMACIÓN CONCEPTUAL:
CARACTERÍSTICAS aceptadas por las distintas definiciones:
Conductas manifiestas: Las HS comprenden conjuntos de capacidades de actuación aprendidas y que se manifiestan en situaciones de interacción social.

Orientación a objetivos: Las HS se orientan a determinados objetivos o reforzamientos, del ambiente (materiales y/o sociales), y personales (autorreforzamiento, autoestima).

Especificidad situacional: Están determinadas pro el contexto socio-cultural y la situación particular en que tienen lugar.

Componentes de las habilidades:
En función del grado de inferencia y especificidad que se adopte:
– Nivel Molar (habilidad de autoafirmación).
– Nivel Intermedio (decir no).
– Nivel molecular (establecer contacto ocular).
Comprenden:
– Componentes conductuales (elementos verbales, no verbales y paralingüísticos).
– Componentes cognitivos y fisiológicos.

CARACTERÍSITCAS DE LOS EHS (entrenamiento en habilidades sociales):
Los EHS se fundamentan en los principios del aprendizaje.
Los HS se aprenden. Papel fundamental de los factores intrínsecos a la persona y de los factores ambientales.

CARACTERÍSTICAS:
a) El modelo de adquisición de conductas en el que se basan: se orientan al desarrollo de habilidades nuevas o conductas alternativas, ampliando el repertorio de conductas adaptativas.
b) Consideración de los sujetos como agentes activos de cambio: Intención de cambio, aceptación y comprensión del procedimiento, y participación activa en el proceso de aprender.
c) Consideración de los EHS como procedimientos psicoeducativos de formación (en lugar de técnicas psicoterapéuticas).
d) Ventajas:
– Resultan familiares a los sujetos.
– Duración breve.
– Terminología simple y sencilla.
– Permiten gran flexibilidad y versatilidad (adaptación a distintas necesidades), y están estructurados (permiten ser aplicados por distintos miembros del equipo).
– La formación de los entrenadores es breve y sencilla.
e) Amplia evidencia sobre su eficacia (sobre todo en adquisición de conductas; esfuerzos para aumentar la generalización).

MODELO EXPLICATIVO DEL FUNCIONAMIENTO DE LAS HS:
El modelo está basado en los trabajos realizados en el marco de la Psicología social: Analogía del modelo ergonómico aplicado al sistema «hombre-máquina», a la interacción «hombre-hombre».
PROCESOS:
– Percepción de las señales sociales de os demás.
– Traducción del significado de esas señales.
– Planificación: búsqueda de posibles alternativas de actuación.
– Actuación: Ejecución de la alternativa considerada más adecuada. Esta ejecución, actúa a su vez como señal social para los demás Repetición del proceso.
La conducta resultante, actúa como una señal de retroalimentación, cerrando el circuito. Cualquier fallo en los procesos, provocaría un «cortocircuito», con el consiguiente comportamiento incompetente.

Se han elaborado otros modelos interactivos más complejos que enfatizan la interacción entre la persona y la situación.
En éste modelo, se considera que el comportamiento hábil viene determinado por las circunstancias relativas a la situación, y por los factores personales, entendiendo la situación como el factor que determina la probabilidad de éxito/fracaso de una interacción, y a la persona como el factor que determina la tendencia a triunfar o fracasar (en función de que posea o no las habilidades necesarias para la situación).

Variables personales: Factores ideográficos (edad/sexo), factores referentes a categorías sociales (raza, etnia, religión, grupos de pertenencia), factores fisiológicos y cognitivos (expectativas, evaluación de resultados, atribuciones de causalidad, habilidades de empatía, etc.).

Variables situacionales:
– Estructura de la meta: motivos, necesidades y objetivos del sujeto respecto a la situación.
– Reglas y normas: que orientan los comportamientos.
– Secuencias de conductas: orden en que se espera que transcurra la interacción.
– Conceptos: vocabulario con un significado especial y compartido, para determinada situación.
– Repertorio de elementos: Que deben mostrarse en cada situación (acciones, palabras, sentimientos), y otros componentes (determinantes físicos del ambiente).

APLICACIÓN DE LOS EHS:
EHS Conjunto de técnicas cuya aplicación se orienta a la adquisición de las habilidades, que permitan a los sujetos mantener interacciones sociales satisfactorias, en su ámbito real de actuaciones.

Técnicas de EHS:
1. Instrucciones y modelado.
Objetivo: Informar y hacer demostraciones de las conductas adecuadas.
2. Ensayo conductual.
Objetivo: Que el sujeto reproduzca y practique esas conductas.
3. Retroalimentación y refuerzo.
Objetivo: Moldear y perfeccionar las conductas exhibidas pro el sujeto.
4. Conjunto de estrategias y técnicas (en contexto del entrenamiento o fuera de él).
Objetivo: Facilitar el mantenimiento y generalización de las conductas aprendidas.
Existe un incremento de la eficacia de las técnicas, cuando su aplicación se realiza de forma coordinada e integrada, formando parte de los EHS.

PREPARACIÓN DE LOS EHS:
Entrevista inicial entre entrenador y sujeto, cuyos objetivos son:
– Comprensión de los objetivos que guían los EHS y cada una de las técnicas.
– Acuerdo en participar y deseo de adquirir nuevas formas de comportamiento, considerando sus ventajas.
– Participación activa en todo el procesos de aprendizaje.
– Implicación activa en el entrenamiento de otros sujetos (caso de grupos).
Evaluación y diagnóstico: análisis de las situaciones sociales que el sujeto debe afrontar en su vida real.

TÉCNICAS e INSTRUCCIONES:
Explicaciones claras y concisas sobre las conductas a entrenar en cada sesión, que incluye:
– Información específica sobre las respuestas y las conductas adecuadas.
– Ejemplos concretos de esas conductas.
– Razones que justifican la importancia de esas conductas.

OBJETIVO: Guiar al sujeto para identificar (al observar al modelo) y ejecutar (en el ensayo), las conductas que van a ser objeto de evaluación y que deberá practicar en su vida real.
La información debe ser breve, con frases cortas y conceptos sencillos, reiterando los más destacados.
Las instrucciones se emplean durante todo el entrenamiento, aunque principalmente, al inicio de cada sesión, salvo para conductas complejas en cuyo caso de realizará junto a la observación de las conductas.

MODELADO: Exhibición por parte de un modelo de las conductas objetivo, en presencia del sujeto que va a ser entrenado.
La observación tiene 3 EFECTOS:
1. Adquisición de conductas nuevas.
2. Inhibición y desinhibición de conductas existentes.
3. Facilitación de determinadas conductas.

CRITERIOS A CONSIDERAR:
1. Personas propuestas como modelos: Es recomendable:
– Que exista similitud entre modelo y observador. Presentar un modelo de coping (titubeo inicial y esfuerzo progresivo para resolver la situación satisfactoriamente), en vez de un modelo de master. El entrenador debe hacer algún comentario acerca de la similitud.
– Que el modelo se muestre amistoso, cercano y agradable, y que su actuación vaya seguida de consecuencias agradables.
– Que se muestren distintos modelos, lo que permite identificar distintas formas de afrontar la situación.

2. Forma de presentación del modelo: El modelo puede ser real (está presente físicamente) o simbólico (grabación o filmación).
En cualquiera de las 2 modalidades:
– La conducta se debe mostrar de forma clara y precisa.
– La presentación debe ser de menor a mayor dificultad.
– Que queden enmarcadas dentro de una secuencia de interacción que tenga sentido propio (duración entre 1-3 minutos).

3. Percepción por parte del observador:
Modelado manifiesto: Observar el comportamiento del modelo (real o simbólico).
Modelado encubierto: Imaginarlo.

ES IMPORTANTE:
– Preparar y predisponer favorablemente al sujeto para la observación.
– Presentar la conducta del modelo como una alternativa posible para abordar la situación (no como el comportamiento correcto).
– Controlar, durante la observación, las condiciones físico-ambientales (visibilidad, acústica, etc.).
– Favorecer las condiciones de sobreaprendizaje: Repetir la exhibición, ensayar y practicar de forma inmediata a la observación.
Se trata de una técnica muy utilizada. Especialmente útil para abordar conductas no verbales, paralingüísticas, y comportamientos complejos, así como para facilitar un rápido aprendizaje.

ENSAYO CONDUCTUAL:
También se conoce como «role-playing».
2 MODALIDADES:
1. Ensayo conductual real: Es la modalidad más empleada, pues permite la supervisión del entrenador.
2. Ensayo conductual encubierto: Se aconseja su utilización conjunta con el anterior, debido a sus ventajas (acceso a situaciones heterogéneas, reales o de carácter personal o íntimo).

SECUENCIA DE APLICACIÓN RECOMENDABLE:
a) El sujeto imagina cómo se ve realizando cierta conducta, lo que le permite analizar y afrontar anticipadamente, posibles consecuencias negativas inesperadas.
b) El sujeto ejercita de forma real la conducta, en la situación de laboratorio, hasta conseguir un nivel de dominio y ejecución adecuado.
c) El sujeto se imagina de nuevo realizando esa conducta en situaciones de su vida real, lo que favorece su generalización.

PARA INCREMENTAR SU EFICACIA:
1. Otorgar al sujeto un papel activo.
2. Centrar el ensayo sobre un objetivo concreto, controlable y fácil de abarcar.
3. Planificar progresivamente de menor a mayor dificultad, las situaciones a las que el sujeto debe enfrentarse y las conductas que debe exhibir.
4. Progresar de situaciones planificadas (guión preestablecido) a situaciones improvisadas y reales.
5. Pasar de representaciones estructuradas (control máximo por parte del entrenador), a semiestructuradas, hasta acabar con representaciones no estructuradas (totalmente improvisadas).
6. Llevar a cabo ensayos reales, en los que la conducta sea manifiesta y publica (en presencia del entrenador y de los miembros del grupo).
7. Reiterar los ensayos para dominar la conducta, evitando factores que interfieran negativamente en el aprendizaje (cansancio, aburrimiento).
8. Emplear contextos, situaciones e interlocutores variados y heterogéneos (fomenta la generalización).

Esta técnica constituye el núcleo central alrededor del cual se articula la aplicación de las otras técnicas.
Su empleo es esencial, pero su eficacia depende de la aplicación conjunta de las otras técnicas.
Para controlar inhibiciones y resistencias, es importante facilitar la participación inicial del sujeto, son papeles fáciles o auxiliares, para que vaya familiarizándose con la técnica.

RETROALIMENTACIÓN:
Proporciona información al sujeto sobre las conductas objetivo exhibidas en el ensayo conductual previo, para moldearlas y conseguir, progresivamente, un nivel de ejecución idóneo.
2 FORMAS:
1. De forma visual Observación de una filmación de la actuación del sujeto.
Ventaja: Objetividad, fiabilidad y precisión de la información.
Es necesario acompañar el visionado con comentarios de algún miembro del equipo de entrenamiento, para centrarlo en las conductas objetivo, contrastar percepciones del sujeto, reducir la ansiedad y evitar la tendencia general a fijarse en los aspecto negativos.
2. De forma verbal Comentarios realizados por los sujetos presentes, que pueden ser:
– El entrenador o algún miembro de su equipo: Comentarios técnicos para describir, comentar, justificar las conductas, y/o corregir, completar o ratificar los comentarios de otros.
– Los restantes sujetos del grupo de entrenamiento: Sus comentarios constituyen un «marco social de referencia». Su relevancia está en emplear lenguaje y criterios de comparación similares o cercanos al sujeto, además de proporcionar puntos de vista heterogéneos.
– El propio sujeto: Debe ir desarrollando poco a poco su capacidad de autoobservación y evaluación, adecuando sus criterios de evaluación a otros más objetivos y relevantes socialmente.

PARA INCREMENTAR LA EFICACIA DE LA RETROALIMENTACIÓN, se aconseja que, una vez finalizado el ensayo, el sujeto comente su actuación; posteriormente, se solicita el comentario de los otros miembros del grupo; se realiza el visionado del vídeo; se efectúa el comentario de los expertos, y, finalmente, se solicita de nuevo al sujeto que analice su actuación.
Asimismo:
– Aplicarla inmediatamente después de los ensayos.
– Centrarlo en conductas concretas y en un número limitado cada vez.
– Que se refiera a las conductas objetivo de los entrenamientos.
– Que se centre en conductas sobre las que el sujeto tiene control.

En cuanto los comentarios verbales:
– Emplear un lenguaje comprensible (evitando tecnicismos).
– Indicar el impacto personal que ha tenido la conducta.
– Que se hagan de forma personalizada y como una impresión personal (no como un juicio objetivo).
– Que se identifiquen las conductas eficaces e ineficaces.

La aplicación de ésta técnica es fundamental para perfeccionar las conductas, pero, su empleo, requiere que los que participan, posean unas capacidades básicas, como son: Que sepan identificar las conductas objetivo y evaluar en qué medida son ejecutadas por el sujeto (requiere entrenamiento complementario en habilidades de comunicación).
La aplicación de retroalimentación entre los miembros del grupo produce beneficios: incremento del aprendizaje observacional, implicación activa de los sujetos en el entrenamiento e incremento de la interacción entre ellos, así como una mayor integración.

REFUERZO:
El OBJETIVO de ésta técnica es contribuir al moldeamiento de las conductas, así como al mantenimiento de las mismas.
El TIPO HABITUAL DE REFUERZO en los EHS es el refuerzo social de tipo verbal y en algunos casos los refuerzos materiales.
Los refuerzos sociales pueden ser aplicados tanto por el entrenador como por los restantes miembros del grupo (especialmente eficaces).

CRITERIOS GENERALES DE APLICACIÓN:
1. Su valor funcional; su aplicación inmediata y contingente a la conducta; el uso de programas sistemáticos de refuerzo; el paso de refuerzos continuos a intermitentes.
2. Diseñar programas de reforzamiento ambiental, para favorecer el mantenimiento y generalización de las conductas.
3. Desarrollar en el sujeto la capacidad de autorrefuerzo (especialmente importante al afrontar situaciones que conllevan consecuencias negativas).

La aplicación en grupo implica que todos los sujetos posean las habilidades tanto para dispensar refuerzos como para recibirlos, lo que hace necesario el entrenamiento en esas habilidades.

Al establecer tareas para casa, hay que seleccionar conductas que el sujeto pueda ejecutar sin dificultad y que posean una alta probabilidad de ser reforzadas en el ambiente.

ESTRATEGIAS DE GENERALIZACIÓN:
Exhibición de las HS en condiciones distintas a las que guiaron el aprendizaje inicial.

Pueden hacer referencia:
Al tiempo: manifestación de la conducta en momentos posteriores al entrenamiento (mantenimiento).
Al contexto: manifestación de la conducta en la vida real (transferencia).
A las situaciones interpersonales: manifestación de la conducta en situaciones distintas a las entrenadas.
A las respuestas: manifestación de la conducta que, si bien no se han entrenado, sí son similares a otras que sí lo han sido.
A las personas: manifestación de la conducta como respuesta a otros interlocutores distintos a aquellos con los que se entrenó.

ESTRATEGIAS Y TÉCNICAS:
1. ESTRATEGIAS APLICADAS EN EL LABORATORIO: Se programan para formar parte de los entrenamientos y ser aplicadas en el mismo contexto.
Realizar ensayos reiterados para lograr sobreaprendizaje.
Afrontar situaciones múltiples, variadas, y lo más relevantes posible.
Interlocutores diferentes.
Condiciones de entrenamiento variadas y lo más similares a la vida real.
Entrenamientos en grupo: permite tener más variedad de interlocutores, exige la sujeto mayor capacidad de improvisación y adaptación.
Planificar la adquisición de las HS: identificarlas y clasificarlas por grupos, para determinar el orden.
Enseñar conductas relevantes y funcionales.
Enseñar estrategias generales, formas diversas de actuar y conductas flexibles y adaptables a las diferentes situaciones sociales.
Desarrollar capacidades cognitivas, que permitan al sujeto discriminar entre señales sociales y estímulos ambientales, así como conocer cómo, cuando y donde emplear una HS en situación real.
Aplicar, complementariamente, distintas técnicas cognitivas (autoinstrucciones, autocontrol, etc.).
Diseñar tratamientos individualizados.
Implicar progresivamente al sujeto en el entrenamiento de otros, dándole así un papel activo.
Programar sesiones regulares de apoyo, una vez acabado el entrenamiento.

2. ESTRATEGIAS APLICADAS EN EL AMBIENTE REAL: La principal estrategia son las tareas para casa. Estas tareas están programadas, y al sujeto se le presta ayuda para analizar el resultado y realizar los entrenamientos de apoyo necesarios.
Recomendaciones para aumentar la eficacia de ésta técnica:
Elaborarlas con la colaboración del sujeto.
Identificar las situaciones y analizar sus consecuencias, para poder predecir las reacciones de lo s demás en la vida real.
Abordar situaciones con elevada probabilidad de éxito (el sujeto las domina y que tienen consecuencias gratificantes) Motivante.
Emplear hojas de registro que permitan identificar las situaciones.
Reforzar a los sujetos cuando hayan realizado las tareas.
También resulta importante:
Facilitar el acceso del sujeto a los contextos en los que puedan practicar las nuevas HS (sobre todo en sujetos internados).
Enseñar a discriminar contextos y buscar ambientes de apoyo que faciliten y refuercen la ejecución de las nuevas HS.
Implicar a personas significativas del ambiente real del sujeto: supervisan, apoyan y refuerzan.
Analizar el posible impacto de las nuevas HS en aquellos grupos del ambiente natural en los que el sujeto deba integrarse de forma necesaria.

VARIACIONES EN LA APLICACIÓN DE LOS EHS.
OTRAS TÉCNICAS EMPLEADAS: Empleo de otras técnicas diferentes de forma conjunta y complementaria a los EHS. Estas técnicas están orientadas al control de los factores que interfieren negativamente la exhibición de las conductas competentes.

Destacan:
Técnicas de control de la ansiedad.
Reestructuración cognitiva.
Técnicas de solución de problemas.

Motivo de la aplicación de estas técnicas:

– Como técnica empleada para afrontar problemas concretos de determinadas personas.
– Como procedimiento adicional a los EHS, para contribuir a la generalización de conductas.
– Como técnicas integradas en los EHS, al entender éstos como procedimientos multimodales.

Existe evidencia contrastada de que, la aplicación de determinadas técnicas cognitivas, incrementan notablemente la eficacia de los EHS, sobre todo en cuanto a la generalización de conductas.

ENTRENAMIENTOS INDIVIDUALES VERSUS GRUPALES:
Los EHS pueden aplicarse de forma individual o grupal.

La FORMA GRUPAL resulta la más frecuente y la potencialmente mas eficaz debido a que:
– Los grupos constituyen un marco de referencia y comparación social.
– El contexto grupal proporciona unas condiciones idóneas de aprendizaje.
– El entrenamiento grupal permite la participación de sujetos ya entrenados a lo largo de todo el proceso. Estos sujetos proporcionan ayuda, y aparte les aporta a ellos mismos un beneficio terapéutico complementario al permitirles practicar HS anteriormente adquiridas.
– Hay razones de tiempo, coste, personal, etc.
RECOMENDACIONES GENERALES EN LA APLICACIÓN DE LOS EHS GRUPALES:

– Número de sujetos entre 4 y 12.
– Cierta homogeneidad en el tipo de déficit que presentan los sujetos (no con respecto al nivel de funcionamiento).

Los EHS INDIVIDUALES permiten diseñar programas a la medida del sujeto, trabajar en un contexto de entrenamiento más controlado, etc.

La combinación de ambas modalidades constituiría un entrenamiento mixto, muy recomendable.

CRITERIOS DE APLICACIÓN DE LOS EHS: TRATAMIENTO ÚNICO VERSUS PROGRAMA INTEGRADO.
El EHS puede aplicarse como tratamiento único o formando parte de un programa comprehensivo que incluye otras técnicas.
POR EJEMPLO: El proceso de rehabilitación psiquiátrica puede representarse como una figura tridimensional («cubo complejo») delimitada por 3 factores:
– El tipo y el estadio del problema.
– Los procedimientos de tratamiento y rehabilitación (Los EHS formarían parte de éstos, junto con, terapias familiares, rehabilitación vocacional, psicoterapia de apoyo, terapia cognitiva y fármacos).
– Los programas de apoyo comunitario.

CONDICIONES DE APLICACIÓN:
Aunque no hay datos concretos sobre las condiciones optimas de aplicación, se pueden establecer algunas
CONSIDERACIONES GENERALES:
a) PLANIFICACIÓN: Considerar:
1. La complejidad de la HS objetivo y el número de componentes que la integran.
2. Qué déficits muestra el sujeto.
3. La modalidad del entrenamiento (grupal, individual, mixto).
4. Cuestiones prácticas: medios y recursos.

b) PUESTA EN PRÁCTICA: Considerar:
1. Número de sesiones: oscilará entre 3 y 15. Conviene incluir alguna sesión adicional de apoyo una vez terminados los entrenamientos.
2. Duración de las sesiones: debe permitir aplicar las técnicas del entrenamiento, pero evitando los factores que incidan negativamente (cansancio, aburrimiento). Duración aconsejable entre 45 y 90 min.
3. Intervalo entre sesiones: intervalo entre sesiones entre 1 y 4 días.

REQUISITOS PARA LA PARTICIPACIÓN DE LOS SUJETOS:
Hay que asegurarse del funcionamiento adecuado de ciertas CAPACIDADES, cuya limitación constituiría un serio impedimento en la aplicación de los EHS:
– Seguir instrucciones y prestar atención a un proceso de aprendizaje estructurado en el tiempo.
– Comprender al terapeuta y hacerse entender por él.
– MCP.
– Control de los desórdenes de pensamientos.
– Síntomas psicóticos.
– Motivación necesaria.

Deben tenerse en cuenta los efectos sedativos de ciertos fármacos.
En personas con dificultades de atención o problemas cognitivos, deben realizarse entrenamientos más intensivos.
Es fundamental motivar la participación, buscando incentivos o metas.
En personas con retraso mental, hay que asegurar que las respuestas que se entrenen sean breves y los términos fáciles de pronunciar y comprender. A veces habrá que usar refuerzos tangibles.

ÁMBITOS DE APLICACIÓN DE LOS EHS:
Aplicaciones más relevantes:

1. PSICOSOCIALES: Va desde el entrenamiento de las «habilidades prosociales», hasta aquella centradas en las relaciones familiares, habilidades para afrontar diferentes ciclos de la vida, problemas de determinados grupos sociales.

2. CLÍNICAS: Para facilitar el ajuste de los sujetos a su contexto real. Problemas de ansiedad social, timidez, soledad. Problemas relacionados con el consumo de alcohol y drogas, con interacciones sexuales inadecuadas, impedimentos físicos y mentales, depresión, esquizofrenia, autismo, etc.

3. ÁMBITO EDUCATIVO: Para desarrollar habilidades básicas, mejorar las relaciones entre profesores y alumnos, como método preventivo de consumo de tóxicos, aislamiento social, conducta agresiva, etc.

4. FORMACIÓN DE PROFESIONALES: Son procedimientos eficaces de formación de recursos humanos: a profesionales de enseñanza, directivos y mandos intermedios, supervisores de instituciones y empresas, líderes políticos, profesionales de la salud, educadores sociales, animadores, etc.
VALORACIÓN CRÍTICA Y CONCLUSIONES

FACTORES QUE HAN CONTRIBUIDO A LA EXPANSIÓN DE LOS EHS:
a) Simplicidad conceptual.
b) Atractivo y similitud con el aprendizaje de otro tipo de competencias.
c) Pueden ser llevados a cabo por sujetos no especialistas, aunque son los psicólogos los más indicados.

Abuso de los EHS: se ha producido una utilización indiscriminada del término, para incluir en ocasiones, todo tipo de terapias de forma poco rigurosa.