Historia de la psicología: IMPACTO DE LA PSICOLOGÍA SOCIAL NORTEAMERICANA EN PICHON RIVIÈRE

Historia de la psicología: IMPACTO DE LA PSICOLOGÍA SOCIAL NORTEAMERICANA EN PICHON RIVIÈRE

Macchioli, Florencia Adriana
UBACyT. Universidad de Buenos Aires. CONICET

RESUMEN
El siguiente trabajo propone diseñar un abordaje inicial respecto
a la ubicación de los tratamientos del grupo familiar en la
obra de Enrique Pichon Rivière. Para ello, se delimitará la recepción
en su teorización de algunos aportes de la Psicología
Social norteamericana. En este caso se analizará el impacto
de los modelos de George Mead y Kurt Lewin. El objetivo de
más largo alcance de este análisis, es reubicar la impronta de
la figura de Pichon Rivière en la historia de los tratamientos
familiares en Argentina, situando a la vez la importante relevancia
que obtuvo la recepción, elaboración y difusión de sus
aportes en la Salud Mental.
Palabras clave: Historia Psicología Argentina familia

El presente trabajo se inserta en el marco de una investigación
de mayor alcance, cuyo objeto es realizar una historia crítica
de la terapia familiar en Argentina. Los ejes de dicha investigación
se centran en la recepción, conformación y difusión de
esta temática.
A grandes rasgos, el tratamiento terapéutico con familias comenzó
a formularse a partir de fines de la década de 1950
donde se inició la incorporación y expansión de la psicoterapia
de grupos, entendida la familia como un grupo primario. Este
hecho posibilitó la entrada de la psicoterapia familiar como otro
aporte al tratamiento para las enfermedades mentales durante
la década de 1960. Se parte del supuesto de que la terapia
familiar, como especialidad autónoma, surgió a partir de la
confluencia de varias corrientes, entre ellas el psicoanálisis y la
teoría de la comunicación. Hacia fines de la década de 1950,
con la difusión de estas nuevas conceptuaciones, se pudieron
analizar desde un nuevo enfoque los fenómenos interaccionales
entre los miembros de la familia, lo que generó a su vez,
nuevos abordajes y reformulaciones de los anteriores modelos.
El objetivo que se plantea en el siguiente trabajo consiste en
un primer abordaje exploratorio de la ubicación de los tratamientos
del grupo familiar en la obra de Enrique Pichon Rivière
(1907-1977). Para ello, se circunscribirá en este desarrollo la
recepción en Pichon de algunos teóricos de la Psicología Social
como George Mead y Kurt Lewin para considerar la teoría
de la interacción que Pichon genera basada en estos autores.
El objetivo de mayor alcance de este análisis, es ubicar el cruce
original planteado por Pichon Rivière entre el psicoanálisis
y la Psicología Social para los tratamientos familiares en Argentina,
situando a la vez la importante innovación que produjo
la recepción, elaboración y difusión de sus aportes en el
campo de la Salud Mental.
Con este fin se apelará a los desarrollos sobre estética de la
recepción, que supone un proceso que implica tres factores: el
autor, la obra y el público. La noción de recepción supone un
doble sentido: apropiación – que implica transformación- e intercambio.
Si aplicamos este modelo a Pichon se observa que
su modalidad consistía en realizar una interesante combinación
de lecturas, integrando ideas de diferentes ámbitos dentro
de una lógica totalmente novedosa y coherente. Podemos encontrar
así desde el psicoanálisis -principalmente la recepción
de Klein- hasta la teoría de campo de Kurt Lewin, la teoría de
los roles desarrollados por George Mead, el concepto de
Gestalt y la teoría de la comunicación, entre algunas de las líneas
predominantes. Se privilegiará en este trabajo el foco
sobre los aportes de la Psicología Social norteamericana,
como una primera etapa del análisis de la recepción en la obra
de Pichon Rivière.

EL IMPACTO DE GEORGE MEAD Y KURT LEWIN EN PICHON RIVIÈRE
Se recortarán, entre la diversidad de autores que Pichon ha
leído y transformado al incluirlo en su modelo, solamente dos:
George Mead y Kurt Lewin, como los principales representantes
de la Psicología Social norteamericana para el abordaje de
grupos. Por la extensión de esta presentación no podrán profundizarse
muchas de las ideas planteadas, ni trabajarse a
fondo los caminos, modos e interpretaciones presentes en
toda recepción que hace un autor de otro. Hecha esta salvedad,
se trazará a continuación un mapa de algunos de los principales
conceptos que retomó Pichon Rivière.
El primer autor que se abordará es George Mead (1863-1931).
Para este autor la esencia de la comunicación humana es la
capacidad de una persona de anticipar las respuestas que
cada acto provocará en las demás, lo que significa su capacidad
para asumir el rol del otro, siendo la comunicación lo que
le permite al individuo transformarse en un objeto para sí. Se
dirige hacia los otros y hacia uno mismo. Esto supone un
aprendizaje que se sitúa en los juegos infantiles donde el niño
aprende, a través de la identificación con otros significativos, a
adoptar consigo mismo la actitud de los otros. Mead ejemplifica
esto a través del juego – equiparable a ubicarse en un rol,
implica las actitudes de un individuo en particular teniendo en
cuenta las actitudes de todos los involucrados en el juego- y el
deporte – supone la organización de las actitudes sociales del
otro generalizado, que hace referencia a un objetivo en común
y convierte al individuo en un miembro orgánico de la sociedad-
(Mead, 1972).
Es el proceso que se completa con la capacidad para asumir
al otro generalizado, lo que permite explicar el desarrollo del sí
mismo. La emergencia del sí mismo no puede desligarse del
proceso de la interacción simbólica. Adoptar el rol del otro generalizado,
es ante todo una actividad reflexiva, que explica
que tengamos conciencia de nosotros mismos como individuos.
De aquí se desprende la distinción entre mi – control
social ejercido sobre nuestra conducta- y yo – creatividad e innovación
personal, en tanto conducta social indeterminada-.
La propuesta de Mead se basa principalmente en la comunicación,
la interacción y la determinación social del comportamiento
individual (Mead, 1972).
Muchas de estas ideas han sido aplicadas por Pichon al trabajo
con grupos operativos. Uno de estos ejemplos puede rastrearse
en la década de 1940, en el Asilo de Torres donde
Pichon incentivaba que los pacientes jugaran al fútbol, donde
priorizaba el deporte en vez del juego, y tomaba como tarea
ganar al otro equipo – resultados tangibles del trabajo en equipo
-, y la interiorización de roles definidos que permiten el desarrollo
del deporte. A lo largo de su obra puede observarse la
incorporación de la teoría de los roles y su ampliación al rol de
«portavoz»[1], la interacción, los vínculos, el otro generalizado
y el juego y deporte, entre algunos de los conceptos principales.
Otro de los autores que Pichon leyó durante la década de 1940
ha sido Kurt Lewin (1890-1947). Se desarrollarán algunos de
los aportes fundamentales que impactaron en Pichon. El primero
se refiere a la teoría del campo, teoría por la cual introdujo
los principios de la escuela de la Gestalt a la Psicología
Social; el segundo se refiere a sus investigaciones sobre dinámica
de grupo, y por último se mencionará su modelo de la
acción-investigación para estudiar la sociedad.
1. Lewin retoma el concepto de campo de la Gestalt -donde
había sido sólo aplicado a la percepción-, y lo introduce en las
áreas de motivación y desarrollo de la personalidad. El campo
supone la totalidad de hechos coexistentes que se conciben
como mutuamente interdependientes y permite entender la
conducta dentro del conjunto de hechos que componen el
campo en un momento determinado, tomar la situación como
totalidad en la que se diferenciarán sus partes y representar el
espacio vital – el ambiente tal como lo percibe la persona – donde
se desarrolla la conducta. Lewin entiende por conducta la
interacción entre la persona y el ambiente, ambas integrantes
del espacio vital (Lewin, 1976).
2. Su estudio experimental con grupos también partió de la
Gestalt, donde los grupos eran considerados como unidad básica
de análisis. A partir de problemas sociales diversos corroboró
que era más fácil inducir el cambio en un grupo que en un
individuo aislado, y desarrolló la idea de cambio planificado. El
grupo para Lewin no se define por la similitud de sus miembros,
sino por sus relaciones de interdependencia. La dinámica
de grupos supone dos procesos: a) la interdependencia de
destino -el destino de cada integrante depende del destino del
grupo como totalidad-; b) la interdependencia de tareas -la dependencia
es mutua para llevar a cabo una tarea, lo que une y
consolida al grupo-. Otro de los aportes en sus investigaciones
sobre dinámica de grupo, fue su teorización sobre diferentes
estilos de liderazgo: democrático, autoritario y laissez – faire.
3. Lewin, por último, propone un modelo de investigación-acción,
donde se plantea vincular la investigación a la acción social.
El objetivo es, para las ciencias sociales y en especial la
Psicología Social, el estudio empírico de la realidad social
completado con estudios comparativos sobre la efectividad de
diferentes técnicas y modelos de cambio social. Supone entonces,
situar a la investigación en el contexto de la planificación
y la acción social.
Varios de estos conceptos han sido retomados y modificados
por Pichon. Algunos de ellos fueron la dinámica de grupos, el
trabajo en el aquí y ahora, los principios de la Gestalt aplicados
a interacción, los estilos de liderazgo al que agrega un cuarto
tipo: el «demagógico». Estas ideas pueden indagarse en su trabajo
con los grupos operativos. También retoma el modelo de
la acción – investigación, que se puede rastrear en la Operación
Rosario, donde realiza una intervención comunitaria.

TRANSFORMACIÓN E INTEGRACIÓN EN LA OBRA DE
PICHON RIVIÈRE
Siguiendo con la teoría de la recepción, podemos ubicar cuál
es la interpretación y selección particular que realiza Pichon.
«Admitir el rol activo del receptor implica reconocer que todo
acto de recepción supone una elección y una parcialidad respecto
de la tradición previa (…), la apropiación y el rechazo, la
conservación del pasado y la renovación» (Jauss, 1981: 38).
En este sentido, a lo largo de los desarrollos de Pichon puede
ubicarse su inspiración conjunta en muy diversos ámbitos
como el psiquiátrico, psicoanalítico, psicológico y social, a través
de los que se ve representado el problema de la familia en
su obra. En este sentido, dentro de la familia se encuentra toda
la trama de vínculos que el sujeto desplegará posteriormente.
A través del prisma que en este trabajo se intenta destacar, el
impacto de la Psicología Social norteamericana en Pichon posibilitó,
dicho en palabras de Kesselman -uno de sus discípulos-, que:

«Enrique Pichon Rivière, psiquiatra y psicoanalista, fue el pionero
en el campo de la Psicología Social en Latinoamérica y
desarrolló desde allí sus principales conceptos, como ser el
concepto de enfermedad como conducta desviada; el de operatividad
como acción correctora; el de grupo operativo: cuyo
ejemplo básico es el grupo familiar y cuyo eje es la tarea realizada
por el grupo y su coordinador en torno a la resolución de
las dificultades que impiden realizar esa tarea, que es fundamentalmente,
el aprender y reaprender a pensar. En el grupo
operativo se desarrolla el drama humano y se representan y
expresan las síntesis y contradicciones entre individuo y sociedad.»
(Kesselman, H., 1999: 76).
Continuando en esta línea, conceptos generales en la obra de
Pichon que se desprenden de los aportes de la Psicología Social
son su conceptuación de la persona como una totalidad
integrada por tres dimensiones: la mente, el cuerpo y el mundo
exterior, integrados dialécticamente. Y su propuesta de una
psiquiatría centrada en las relaciones interpersonales que denomina
Psiquiatría del Vínculo, que construye con postulados
de la Psicología Social y el psicoanálisis.
Volviendo a la cuestión de la familia, puede observarse su ubicación
como uno de los ejes centrales del modelo pichoneano.
A continuación se mencionarán brevemente algunas de las
conceptuaciones más próximas al aspecto social e interaccional
desplegados en su obra.
Una de las primeras cuestiones es la diferenciación que Pichon
realizó en sus clases al referirse a la familia como grupo primario,
pudiendo analizarse en tres niveles:
1. Desde el punto de vista psicológico o psicosocial: o lo que
Pichon llama grupo interno. Es el campo psicológico del individuo,
sus representaciones internas sobre la familia en conjunto
y sobre cada miembro en particular.
2. Desde el punto de vista de la dinámica de grupo o sociodinámico:
comprende los problemas de la familia según determinadas
circunstancias tanto externas como internas al grupo
(peligros exteriores, muertes o admisión de nuevos miembros
que modifican las relaciones de autoridad, prestigio, etc.) En
este nivel es importante observar los índices de rigidez o plasticidad
del grupo.
3. Desde el punto de vista institucional: comprende las clases
sociales y las transformaciones de la institución familiar por
crisis económicas, guerras o cambios de costumbres.
Continuando con esta clasificación, y acentuando el impacto
de la teoría de la interacción de Lewin en su obra, entiende a
la familia, desde el nivel sociodinámico, como un grupo que
incluye los roles, comunicación, aprendizaje y liderazgo. En
este nivel se ubica la idea de campo, y aparece explícitamente
en Pichon la terminología gestáltica, en las menciones de los
roles interdependientes o la red de roles y vínculos. El campo
psicológico para Pichon es el campo de interacciones entre el
individuo y el medio, donde el objeto mismo de la psicología es
el campo de la interacción (Pichon Rivière, E., 1985: 61). Retoma
de Lewin los estilos de liderazgo y de Mead la teoría de
los roles y el deporte como tarea socializadora.
Cabe mencionar que además de pensarse el grupo familiar
sociodinámico en la dimensión actual del aquí y ahora, se da
simultáneamente la dimensión psicosocial que tiene en cuenta
el grupo latente a través de la teoría psicoanalítica de impronta
kleiniana, completamente enraizada en su teorización, no desarrollada
en el presente trabajo.
A partir de este sucinto recorrido, se observa claramente como
Pichon rompe con la idealización de la familia de la psiquiatría
clásica. No niega la existencia de la enfermedad mental, pero
ubica a la familia como uno de los generadores de patología y
mantenimiento de la enfermedad. En esta línea entiende el
tratamiento del grupo familiar desde la inclusión de la familia
en el tratamiento, el enfermo como portavoz de la ansiedad y
patología familiar, el interjuego de roles adjudicados en la situación
básica triangular y la aplicación del encuadre del grupo
operativo a la familia.

CONSIDERACIONES FINALES.
A lo largo de este recorrido se ha trazado un abordaje preliminar
de la obra de Pichon Rivière donde se puede rastrear la
fuerte impronta de las lecturas que realizaba, junto a la transformación
que supone toda apropiación. Se ha destacado puntualmente
en este trabajo el impacto de dos representantes de
la Psicología Social norteamericana, George Mead y Kurt
Lewin, con el fin de visibilizar la recepción de estos originales
aportes, y a su vez la innovadora relectura que Pichon genera
de este material. Este es un primer abordaje a la operación de
recepción que realiza Pichon. Está línea se seguirá ampliando
a otros autores y desarrollos que figuran a lo largo de su obra
respecto a los grupos familiares.
Por tanto, se puede ubicar a Pichon Rivière como el primer
autor que impactó de un modo original para el posterior desarrollo
de la Terapia Familiar en la Argentina. A esto corresponde
sumar su gran capacidad como formador y difusor de teorías y
técnicas a muchas camadas de profesionales de la Salud
Mental. Su enseñanza dio lugar a diversos desarrollos y su
obra impactó en los principales autores que trataron la cuestión
familiar desde fines de la década de 1950.
Sin lugar a dudas, el desarrollo de esta especialidad en Argentina
no hubiera sido una de las pioneras a nivel mundial durante
la década de 1960 de no haber intercedido en esta historia
la figura de Enrique Pichon Rivière.

BIBLIOGRAFÍA
Alvaro, L. y Garrido, A. (2003) Psicología social. Perspectivas psicológicas y
sociológicas, Madrid: Mc Graw Hill.
Chayo, Y. (2005) «Utopías surrealistas. Teorías grupalistas». Representaciones.
Revista de estudios sobre Representación en ciencia, arte y filosofía, Facultad
de Filosofía y Humanidades, Universidad Nacional de Córdoba. En prensa.
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Kesselman, H. (1999) La psicoterapia operativa 2, Buenos Aires: Lumen.
Lewin, K. (1976) Field theory in social science. Selected theoretical papers,
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Macchioli, F. (2003) «Antecedentes de la Terapia Familiar en Argentina», Temas
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Mead, G. (1972) Espíritu, persona y sociedad, Madrid: Paidós.
Pichon Rivière, E. (1971) Del Psicoanálisis a la Psicología Social, Buenos
Aires: Editorial Galerna. (1985) Teoría del vínculo, Buenos Aires: Nueva
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V.V.A.A. (1971) Interacción Familiar, Buenos Aires: Tiempo Contemporáneo.
Vezzetti, H. (1996), Aventuras de Freud en el país de los argentinos, Buenos
Aires: Paidós. (1998) «Enrique Pichon Rivière y la operación Rosario»,
Página/12, 11/6/98. (1999) «Enrique Pichon Rivière y Gino Germani: el
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(1999) «Enrique Pichon Rivière: la locura y la ciudad», Topía, N. 27. (2003)
«Enrique Pichon Rivière: el vínculo y la Gestalt», Anuario de Investigaciones
X, Facultad de Psicología, UBA.

NOTA
[1] El rol de «portavoz» es según Pichon: «el miembro que en un momento
dado denuncia el acontecer grupal, las fantasías que los mueven, y las
ansiedades y necesidades de la totalidad del grupo. Pero el portavoz no habla
solamente por sí sino por todos, en él se conjugan lo que llamamos verticalidad
y horizontalidad grupal, entendiendo por verticalidad lo referido a la historia
personal del sujeto y horizontalidad el proceso actual que se cumple en el
aquí y ahora en la totalidad de los miembros (Pichon Riviére, 1971: 320-321).