III- Usos de las nuevas tecnologías en las aulas:

Aprender y enseñar en la cultura digital – Inés Dussel

Un último aspecto didáctico sobre el que indagamos es si los docentes creen que cambiará la manera de evaluar (cf. Burke y Hammett, 2009). Las respuestas fueron ambiguas: se percibe que es posible que pueda llegar a cambiar la forma de evaluación de las diferentes materias aunque todavía no se visualiza de qué manera. En primer lugar, muchos suponen que en algún momento deberán comenzar a evaluar la integración de los recursos tecnológicos al aprendizaje del aula, pero los docentes no se sienten capacitados para hacerlo. Por otro lado, algunos docentes reportaron estar evaluando por Internet, sobre todo los docentes de inglés –que tienen sitios internacionales en los que apoyarse– y los
de matemática y ciencias.
“La autoevaluación de esta página fue hermosa, los chicos lo hacían nuevamente con la idea de que les salieran todos bien para sacarse el 100%, eso los incentivó mucho.”
“Yo lo apliqué una vez; en algunas páginas que encontré aparecen evaluaciones
donde hay que marcar la respuesta correcta, y abajo aparecen los resultados, o
a veces te sale correcto o incorrecto, y la usé con la máquina directamente, pero
son pruebas de elección múltiple, un múltiple choice.”
En los dos casos, lo que se destaca es la inmediatez de la respuesta, del feedback sobre cómo fue el examen. El primer relato destaca también que los chicos querían sacarse el máximo puntaje, “ganar”. Es ineludible la comparación con los videojuegos: parece que lo que convoca este tipo de evaluaciones es la interactividad, la inmediatez y la competencia. Habrá que estar atentos a qué se aprende con este tipo de evaluaciones, y también habrá que buscar proponer otras que promuevan operaciones más relevantes y más cercanas al tipo de trabajo pedagógico que se quiere promover.

Referencias:
1 – Para pensar en usos más ricos remito a textos como los de Tyner, 2008; Walsh, 2008; Carrington y Robinson, 2009; Drotner y Schroeder, 2010.
2 – Por eso, estudiosos del arte o de la arquitectura siguen prefiriendo el viejo carrusel de diapositivas que les permite mostrar imágenes verticales y dar una sensación de profundidad, lo que no permite el formato apaisado de la diapositiva del Power Point (Petroski, 206:41).
3 – Un joven de una escuela de sectores bajos de Mar del Plata relató que lleva algunas imágenes a la escuela para compartir con sus amigos, y cuando le preguntamos qué tipo de fotos, respondió: “[Traemos imágenes] flasheras
(…) Fotos flasheras son fotos que te deslumbran, mirás la foto y decís “¡Uh, mirá esto!”. Puede ser, por ejemplo, la luna, pero vista de cerca, o alguna foto psicodélica o algo así.” (Alumno, Escuela media pública sectores bajos,
Mar del Plata, Argentina). El régimen visual contemporáneo está dominado por estímulos visuales cada vez más espectaculares y dramáticos que nos “roban” la atención y nos dejan hipnotizados mirando a la pantalla (por eso el término “wow” de Jenkins: “apantallados”, boquiabiertos, sin palabras). Véase también Jaguaribe (2007) sobre la estética sensacionalista contemporánea y sus efectos políticos.

FUENTE: Aprender y enseñar en la cultura digital – Inés Dussel

Autor: psicopsi

Sitio dedicado a la divulgación de material de estudio. Psicoanálisis, psicología, antropología, sociología, filosofía y toda ciencia, disciplina y práctica dedicada al estudio del ser humano