Inicios de la Psicología Actual

Inicios de la Psicología Actual

Los inicios de la Psicología actual.

A finales de siglo XIX y principios del XX la Psicología ya está presente en muchos ámbitos de la vida humana, produciéndose una avalancha de enfoques, teorías y escuelas cuyos referentes principales son el conductismo y el psicoanálisis. El nacimiento del conductismo se hace coincidir con un artículo de Watson titulado “Psychology as the Behaviorist Views it” (1913), llegando a dominar este movimiento la psicología experimental norteamericana (1930- 1960).

John B. Watson (1878–1958), consideraba que las teorías de Freud eran muy vagas y debía implantarse el conductismo, pues el concepto de conciencia no era útil ni necesario en la descripción, explicación, predicción y control de la conducta.
La finalidad de la ciencia psicológica era poder predecir la respuesta de un organismo frente a un estímulo determinado, al margen de los pensamientos y sentimientos. Sus trabajos más conocidos son: “Psychology from the standpoint of a behaviourist” (1919) y “Behaviorism” (1925). Su prestigio dio un gran empuje al estudio del aprendizaje.
Fue presidente de la Asociación Norteamericana de Psicología (1915). Pronto varios psicólogos de prestigio se alinearon con el antisubjetivismo watsoniano, aunque algunos modificaron sus elementos, surgiendo una serie de grupos conductistas o neoconductistas que polemizaban entre sí. E. B. Holt, A. P. Weiss, K. Lashley, E. C. Tolman, E. R. Guthrie, C. L. Hull y B. F. Skinner son, en orden cronológico, los máximos exponentes del neoconductismo. Clark L. Hull (1884–1952), formula una teoría general basada en el concepto de reforzamiento y explica el aprendizaje como una reducción en la pulsión o las necesidades del individuo, siendo esas conductas las que se repetirán con mayor frecuencia en el futuro. Los principios relacionados con la reducción de los impulsos son, sin duda, los más usados en educación, creando en el alumno una “necesidad” con la intención de que el aprendizaje sea considerado como algo significativo y deseado. Sólo se da cuando satisface la “necesidad de conocer”.
A su vez Edward C. Tolman (1886–1959), es autor de importantes trabajos sobre el comportamiento y la intencionalidad de los actos humanos y animales. Describió un conjunto de variables que afectan a la conducta, algunas observables directamente y otras deducibles por el psicólogo a partir de los datos observables (variables intervinientes). Quizá, su obra principal sea “Conducta intencional en los animales y en el hombre” (1932). Pero el más brillante del grupo neoconductista es Burrhus F. Skinner (1904–1990), que retomó el antisubjetivismo del maestro y elaboró una “tecnología de la conducta” aplicando métodos y criterios diferentes. En “Ciencia y conducta humana” (1953) y “Más allá de la libertad y de la dignidad” (1971) sale en
defensa de la ciencia naturalista y determinista, argumentando contra la concepción occidental que ve en el hombre a un ser libre y responsable. El “Condicionamiento Operante” o instrumental, promovido por él, ha sido reconocido por la comunidad científica mundial con varias distinciones: la National Medal of Science (1968) y la APA (1971).

El Psicoanálisis (término empleado en 1896 por primera vez) es una corriente radicalmente opuesta a la anterior y está vinculada por entero a la singular figura de Sigmund Freud (1856-1939). Éste descubre la vida anímica inconsciente y estudia no sólo los sueños, sino también los actos fallidos, los olvidos, la alteración de las palabras, los chistes, etc. Sustituye el concepto de resistencia por el de represión como mecanismo de defensa del yo, así como el hipnotismo de Charcot y el método catártico de Breuer por el método de asociación libre. Quizás la aportación más importante de Freud fue demostrar que nuestro comportamiento está influenciado por la biología, pero al mismo tiempo somos resultado de la socialización.
Resta decir que este autor fue un excelente observador de la condición humana y mucho de lo que dijo aún hoy tiene relevancia, tanta que sus análisis y descubrimientos se exponen en los libros de Psicopatología de la Personalidad; incluso cuando algunos teóricos plantean nuevas teorías sobre cómo “funciona la persona”, comparan sus ideas con las freudianas.
No obstante, entre los discípulos de Freud pronto se alzaron voces críticas como las de A. Adler y de C. G. Jung. Alfred Adler (1870-1937), crea su propio sistema psicoanalítico basado en la importancia de las compensaciones y lo llama Psicología Individual, para diferenciarlo del psicoanálisis freudiano, donde lo fundamental es la persona y cómo ésta se integra en la sociedad. Si no fuera así, o la persona no alcanza las metas u objetivos que se propone, se produce en ella una frustración. La posición de Adler será retomada en los EEUU por los “culturalistas” (H. S. Sullivan, K. Horney y, en parte, E. Fromm) influidos por las tesis de la antropología cultural y del conductismo.
Carl G. Jung (1875-1961), fue muy apreciado por Freud y le consideraba su sucesor. De hecho, se le nombró primer presidente de la Asociación Psicoanalítica Internacional (1910), pero luego empezó a contradecir a su maestro y fundó su propia escuela. Sustituyó el concepto de inconsciente individual por el colectivo, que es “heredado” y está en cada uno a nivel inconsciente, dando así origen a una psicología innatista.
Otro importante distanciamiento de la teoría freudiana es impulsado por Otto Rank (1884-1929), quién otorga un papel clave a la voluntad y soslaya la participación exclusiva del inconsciente en el gobierno de la conducta. También Wilhem Reich (1897-1957), deja un importante legado acerca del proceso psicoterapeútico desde la globalidad de la intervención, tanto con la palabra como con el cuerpo. Otros seguidores del psicoanálisis fueron:
Karen Horney (1885-1952), que se opuso al complejo de castración propuesto por Freud y abogó por la primacía de los factores sociales en la neurosis; Anna Freud (1895-1982), hija de S. Freud, y Melanie Klein (1882-1960), que crearon dos formas distintas de aplicar el psicoanálisis en niños; Jacques Lacan (1901- 1981), que destaca el lenguaje y la necesidad de hacer contacto con el período preverbal del inconsciente; Heinz Kohut (1913-1981), fundador de la psicología del self; y James Masterson (1926- ) y Otto Kernberg (1928- ), que abordan los trastornos limítrofe y narcisista de la personalidad.
Paralelamente a la obra de Freud, el francés Pierre Janet (1859-1947), que no es psicoanalista, estudia el sonambulismo y las “personalidades desintegradas”. Da importancia a los sentimientos, a la inteligencia emocional y a la empatía. Mención aparte hay que hacer del fascinante médico psiquiatra suizo de la primera generación freudiana, Hermann Rorschach (1884- 1922). Desde muy pronto manifestó un gusto especial por el dibujo y se entusiasmó con las ideas de Freud mientras se iniciaba en la técnica de la asociación verbal. Fundó la Sociedad Suiza de Psicoanálisis (1919), en cuyo seno desempeñó un papel importante. Diseñó un test de investigación de la personalidad basado en la interpretación de unos dibujos simétricos, producidos por una mancha de tinta esparcida aleatoriamente sobre un papel doblado. Durante los tres últimos años de su breve vida redactó “Psychodiagnostik” (1921), en la que vierte sus ideas sobre el sueño, las alucinaciones, el delirio, la locura, etc.
Un hito importante, en la Historia de la Psicología en el mundo, lo constituye la Gestaltpsychologie o Psicología de la Forma que se fundamenta en el innatismo. Nació en Alemania hacia 1912, casi al mismo tiempo que el conductismo en Norteamérica al que se contrapone desde el plano epistemológico.
El precursor inmediato es C. von Ehrenfels (1859-1932), con el concepto de “cualidad-gestalt” (1890), pero nace con M. Wertheimer y sus colaboradores Köhler y Koffka, quienes fundan la revista “Psychologische Forschung” (1921), convirtiéndose en la publicación oficial del movimiento en Europa hasta ser suprimida por el régimen hitleriano (1938). Max Wertheimer (1880-1943), mientras enseñaba en la Universidad de Francfort, probó con un taquistoscopio que el fenómeno “phi” dependía de ciertos intervalos de tiempo críticos y no podía explicarse a partir de elementos sensoriales aislados, ni de ninguna otra serie de elementos psicológicos.
De esta forma se opuso a la escuela del estructuralismo y a las enseñanzas de Wundt. Otro pionero es Wolfgang Köhler (1887-1957), que emigró a EEUU antes de estallar la II Guerra Mundial, donde prosiguió su carrera docente en Swarthmore College. En su libro “La mentalidad de los monos” (1925), demuestra que los simios aprenden a partir de totalidades y no de las partes, lo que ocurrirá en los seres humanos con mucha mayor razón, y critica a los conductistas por su manera mecánica de concebir el aprendizaje humano.
También Kurt Koffka (1886-1941), psicólogo alemán, es fundador del gestaltismo junto con los anteriores. Estudió en las universidades de Berlín, Friburgo, Wurzburgo y Edimburgo, y fue catedrático de Psicología en las de Wurzburgo y Frankfurt am Heissen. En EE UU enseñó en las universidades de Cornell (Chicago) y Wisconsin y, desde 1927 hasta su muerte, en el Smith College. Sus obras “The Growth of the Mind” (1924) y “Principles of Gestalt Psychology” (1935), fundamentan la psicología estructuralista y enuncian los principios básicos de las teorías de la Psicología de la Forma.
Hugo Münsterberg (1863–1916), se interesó por la psicología experimental y, al ser nombrado profesor de filosofía de Friburgo (1887), instaló un laboratorio en su propio domicilio. Invitado por W. James se hizo cargo del laboratorio psicológico de Harvard (1892), donde permaneció el resto de su vida, a excepción de breves intervalos pasados en Friburgo (1895-97) y en Berlín con motivo de un intercambio de profesores (1911-12). Aparece como precursor de la escuela psicológica del behaviorismo y uno de los primeros exploradores en el campo de la psicología aplicada, especialmente la criminal e industrial. Escribió: “Grundzüge der Psychologie” (1900), “On the Witness Stand” (1908), “Psychology and Industrial Efficiency” (1913) y “Psychology General and Applied” (1914). Algunos autores lo consideran el padre de la Psicología Industrial.
Más conocido es Edward L. Thorndike (1874–1949), sobre todo por las leyes del aprendizaje (del efecto, del ejercicio y de la disposición) y, también, porque es uno de los principales precursores del conductismo.
Para Thorndike el aprendizaje consiste en una serie de conexiones entre estímulo-respuesta que se refuerzan cuando generan un estado de cosas satisfactorio para el organismo. Sobre esta teoría Skinner construye su Condicionamiento Operante. Fue profesor de Psicología durante más de treinta años en el Teachers College de la Universidad de Columbia (EEUU).
Sir Frederick Ch. Bartlett (1886-1969), durante treinta años fue director del Laboratorio de Psicología Experimental de Cambridge, uno de los centros más prestigiosos y de mayor influencia en la psicología británica de principios del siglo XX. Es autor de “Remembering” (1932). Desde sus preocupaciones antropológicas iniciales se va acercando a la Psicología (1936), bajo los auspicios de H. Head, Ch. S. Myers o W. H. Rivers. Fue editor del British Journal of Psychology (1924- 48) y presidente de la British Psychological Society (1950). En 1952 se retira de la cátedra y recibe la Royal Medal y el Longacre Award of the Aeromedical Association. Fue nombrado doctor honoris causa por varias universidades europeas y elegido “miembro extranjero asociado” de la Academia Nacional Norteamericana de Ciencias, de la Academia de Artes Norteamericana (1959) y de la American Philosophical Society, así como miembro honorario de sociedades psicológicas nacionales de diversos países.
Charles S. Myers (1873-1946) fue autor de un “Manual de Psicología Experimental” que tuvo dos ediciones (1909 y 1911) y coautor de una tercera (1925), junto con Bartlett. El primer manual sirvió de texto para sus trabajos en el laboratorio de Cambridge.
A su vez Louis L. Thurstone (1887–1955), realizó grandes aportaciones a la medición de la inteligencia y de las actitudes sociales. Fue pionero en la aplicación del análisis factorial, como técnica matemática estadística a la investigación psicológica. Defendió la explicación de la inteligencia como conjunto de siete capacidades o factores, identificables mediante el análisis factorial. Sus principales publicaciones son:“Factorial analysis of intelligence” (1941); “Psychological implications of factor analysis” (1948); y “The measurement of values” (1959). Evolucionó del plano psicofísico al psicológico aplicando las ideas de Fechner a estímulos psicológicos en lugar de a estímulos físicos. Por su parte, Joy P. Guilford (1897-1987), hizo numerosos análisis factoriales sobre la personalidad y las aptitudes cognoscitivas y elaboró un modelo estructural de la inteligencia.
Sus trabajos han sido la base de múltiples cuestionarios de personalidad. Entre sus obras publicadas destacan: “Psicología general” (1940), “Creatividad y educación” (1968) y “Aptitud para la creación” (1985). Fue el primero en determinar los factores que intervienen en la creatividad (1959) y da nombre a un test que mide el pensamiento divergente.
Mientras tanto a Colemann R. Griffith (1893-1966), se le atribuye la paternidad de la Psicología del deporte americano. En Illinois puso en marcha el primer laboratorio de psicología deportiva y en Chicago ayudó a crear una de las primeras escuelas de entrenadores de América. Escribió libros y artículos sobre Psicología aplicada al deporte. Por último, William Stern (1871-1938), contribuyó con la noción de cociente intelectual o CI y estudió los problemas metodológicos relativos a su medición.
Dedicamos una atención preferente al eminente psicólogo Lev S. Vygotsky (1896-1934), que luchó por la construcción de una psicología científica rusa a partir del materialismo dialéctico e histórico, situándose en contra de la psicología subjetiva e idealista imperante. En su breve actividad científica escribió cerca de 180 títulos entre monografías y artículos. Al cerrarse el laboratorio de Psicología al tiempo que surgía la Academia de Psiconeuropatología de Ucrania con una sección de Psicología, trabajó junto a A. R. Luria, A. N. Leontiev, L. I. Bozhovich y A. V. Zaparochets. En el Instituto Pedagógico de A. I. Guercin de Leningrado dio conferencias y dirigió trabajos de posgrado; allí mismo organizó un grupo de colaboradores importante formado por: M. A. Levina, T. E. Connikova, CH. I. Chif, D. B. Elkonin y otros, así como con los estudiantes que preparaban sus tesis. El trabajo científico lo centró, sobretodo, en la psicología infantil, tareas de la enseñanza y el desarrollo. Sus trabajos están editados en una colección de 6 tomos (1982-1984).
Por esos mismos años Elton Mayo (1880–1949), se hizo famoso dentro del campo de la Psicología del Trabajo y de las Organizaciones por una investigación que realizó en la Western Electric’s Hawthorne Works de Chicago (1924), con el objeto de establecer relaciones entre satisfacción del trabajador y productividad, demostrando que el aspecto psicológico es de gran importancia en las tareas administrativas. No menos conocido es David C. Mc.Clelland en el campo de la motivación. Su teoría (1962), sostiene que los factores motivacionales pueden ser grupales y culturales. Además afirma que hay tres tipos de factores impulsores: logro, afiliación y poder. Dado que cualquier empresa, y cada departamento dentro de ella, agrupa a individuos que trabajan para alcanzar metas conjuntas, la necesidad de realización es muy importante.
Douglas Mc Gregor (1906-1964), es el primero en fijar posiciones sobre el comportamiento humano y uno de los fundadores del Departamento de Relaciones Industriales de Matchachutsses Institute Technology. Es autor de libros como “El lado humano de la Empresa” (1960). Para Frederick Herzberg (1923-2000), la satisfacción y la insatisfacción en el trabajo son debidas a dos tipos de factores. Cuando las personas se sienten bien con su trabajo lo atribuyen a factores intrínsecos (motivadores) como: los logros, el reconocimiento, el trabajo mismo, la responsabilidad, los ascensos y el crecimiento o desarrollo; cuando están insatisfechos lo achacan a factores extrínsecos (higiénicos), como: las políticas, la organización, la supervisión, las relaciones interpersonales, los sueldos y las condiciones de trabajo. Chris Argyris (1923–), en fin, ha escrito sobre la dirección y el desarrollo organizacional en su libro “Conocimiento para la acción” (2001).
Dentro de la psicología infantil, Arnold L. Gesell (1880-1961), investiga el crecimiento y desarrollo de los niños por medio de grabaciones y otros procedimientos (cámara de Gesell). También estudia la psicología de la infancia anormal y el desarrollo de los mellizos y los retrasados. Sus obras principales son: “Infancy Human Growth” (1928) y “Vision: His Development in Infant and Child” (1949). Henri Wallon (1879–1962), que ha sido, probablemente, el psicólogo francés más importante del siglo XX, se dedicó a estudiar el desarrollo psicológico del niño y la educación. Su pensamiento es de gran calidad, pero ha quedado eclipsado por el de Piaget y, sobre todo, por el de Vygotski con quien tiene conexiones. Publicó temas importantes a los que la revista “Enfance” ha dedicado varios monográficos.
Sin embargo, es justo reconocer que Jean Piaget (1896–1980), es quien más ha influido en la comprensión del desarrollo psicológico humano, a pesar de que prestó muy poca atención al ámbito educativo y tan sólo publicó un breve artículo sobre esta materia. Doctorado en Ciencias Naturales (1918), se traslada a Zürich con la intención de trabajar en el Laboratorio de Psicología, pero es en Ginebra (1921), donde funda el Centre International d’Epistémologie Génétique, en la Facultad de Ciencias (1955). La elaboración de una epistemología proviene de su convicción de que los procesos mentales son una prolongación de los procesos vitales orgánicos y que, por tanto, pueden aplicarse métodos de estudio similares.
Piaget es considerado el principal representante del constructivismo. Bärbel Inhelder (1913–1997), fue alumna distinguida de Claparède y Piaget, estuvo de profesora de Psicología en el Instituto Rousseau y, tras jubilarse Piaget, ocupó la cátedra de psicología genética y experimental en la Universidad de Ginebra (1971). Idea el método de entrevista clínica.
Tras publicar su tesis por encargo del Ministerio de Educación francés, dirige un servicio psicológico de diagnóstico precoz para niños con dificultades de aprendizaje.
Crea la Fundación de Archivos Jean Piaget.-Inhelder (1974) y es la primera mujer miembro del Fonds National Suisse de la Recherche Scientifique.
Un seguidor aventajado de Piaget es David P. Ausubel (1918–), que estudió en la New York University y, después de graduarse en la Universidad de Middlesex, ejerció la Medicina en el hospital de Gouveneur en la zona más pobre de Manhattan. Desde 1973 se dedica a la práctica psiquiátrica y a la publicación de obras sobre psicología del desarrollo y de la educación, consumo de drogas, psicopatología, etc. y multitud de artículos en diarios psicológicos y psiquiátricos.
Recibió la concesión de Thorndike de la APA (1976), por sus contribuciones psicológicas a la educación. La aportación más destacable de Ausubel está relacionada con las estrategias de enseñanza para lograr aprendizajes significativos.
Tenemos que hacer una mención especial a David Weschler (1896-1981), nacido en Rumanía, que emigró con sus padres a EEUU cuando era niño. Estudió en el City College de New York y en la Columbia University. Durante la I Guerra Mundial trabajó con el ejército americano para desarrollar tests que sirvieran para examinar a los nuevos reclutas mientras él estudiaba bajo la tutela de Ch. Spearman y K. Pearson. Realizó el doctorado (1925), bajo la dirección de R. S. Woodworth y desempeñó la jefatura de Psicología en el hospital psiquiátrico Bellevue de Nueva York (1932-1967), donde desarrolló una serie de pruebas de inteligencia. La Escala Wechsler de Inteligencia para Adultos (WAIS) fue aplicada por primera vez en 1939, de la cual derivó la Escala Wechsler de Inteligencia para Niños (WISC, 1949) y la Wechsler Preschool and Primary Scale of Intelligence (WPPSI, 1967). El objetivo era conocer mejor a sus pacientes, por no satisfacerle el test de Binet, a través de un instrumento que mejorara los resultados.
Konrad Z. Lorenz (1903-1989), es el principal exponente de la Etología como disciplina científica.
Posteriormente, N. Tinbergen y William H. Thorpe (1902- ), desarrollan sus propios planteamientos.
La Etología surge como una reacción a la Psicología Comparada, centrando su campo de trabajo en el concepto de instinto. No obstante, son más las coincidencias que las diferencias entre ambas disciplinas, como: la impronta, los procesos perceptivos, la relación materno- filial, etc. Nikolaas Tinbergen (1907–1988), se doctoró en Ciencia por la Universidad de Leiden en donde fue profesor de Zoología Experimental. También trabajó en la Universidad de Oxford al frente del Departamento de Investigación del Comportamiento Animal; desarrolló un Centro de Etología del Niño en Oxford y recibió el Premio Nobel de Fisiología o Medicina (1973) compartido con Konrad Lorenz y Karl R.von Frisch.
Entre otras obras, publicó: “The Study of Instinct” (1954) y “The Animal in its world. Field studies” (1932-1972).
Carl R. Rogers (1902–1987), es un auténtico humanista y no comparte puntos de vista ni con el conductismo, ni con el psicoanálisis. Su vida profesional empieza en el Departamento de Estudios del Niño de la Sociedad para la Prevención de la Crueldad con los Niños de Rochester (Nueva York, 1928), del que es nombrado director, al convertirse en el Centro de Orientación Infantil (1939). Resultado del trabajo de esta época es su libro sobre el “Tratamiento clínico del niño problemático” (1939). El 11 de diciembre de 1940 dio una conferencia en la Universidad de Minnesota que es considerada el nacimiento de la terapia no directiva. Los últimos 20 años de su vida los pasó desarrollando el enfoque centrado en la persona. Otras figuras destacadas del pensamiento humanista son: V. Frankl, A. Maslow, R. May y F. Perls. Víctor E. Frankl (1905–1997), sobrevivió al Holocausto alemán, incluso tras haber estado en cuatro campos de concentración nazis, incluyendo el de Auschwitz (1942- 1945). En Viena fue Jefe del Departamento de Neurología del Vienna Polyclinic Hospital, cargo que desempeñó durante 25 años, y fue profesor tanto de neurología como de psiquiatría en diversas universidades norteamericanas (Harvard, Stanford, Dallas, Pittsburg y San Diego). Sus 32 libros sobre análisis existencial y logoterapia han sido traducidos a 26 idiomas y ha conseguido 29 doctorados honorarios. Recibió el premio Oskar Pfister de la Sociedad Americana de Psiquiatría y otras distinciones de diferentes países europeos.
Abraham H. Maslow (1908-1970), ideó una teoría para explicar ciertas necesidades humanas. Defendió la posibilidad real de mejorar la naturaleza humana y, por extensión, la sociedad. Estableció que las tres premisas que influyen en la política de recursos humanos de las empresas son: a) el potencial mental de las personas; b) la insatisfacción como un estado natural del ser humano; c) que éste posee necesidades básicas que deben satisfacerse simultáneamente. Escribió, entre otros, los siguientes libros: “La motivación y la personalidad” y “Hacia la psicología de ser”. Friedrich S. Perls (1893–1970), conocido mundialmente como Fritz Perls, es un médico psiquiatra creador de la Terapia Gestalt. Por su propio carácter fue orientándose
hacia un sistema terapéutico centrado en el presente, guiado por el nivel emocional y dando valor terapéutico a la acción. El libro que le hizo famoso se titula “Dentro y fuera del cubo de la basura” (1969), autobiografía de recuerdos y reflexiones que conforman la experiencia de su vida.
Rollo May (1909–), trabajó en Grecia durante tres años y luego en Viena con A. Adler, cuyo enfoque influyó en él de forma considerable. Regresó a Nueva York para estudiar psicoanálisis en el Instituto William Alanson White de Psiquiatría, Psicoanálisis y Psicología. Se doctoró en psicología clínica por la Universidad de Columbia y escribió la obra “The Meaning of Anxiety” (1977), que tuvo amplia repercusión en EE.UU. Estuvo de orientador para estudiantes universitarios en el City College de Nueva York y ejerció la práctica privada en psicoanálisis además de la docencia en la Escuela Nueva para la Investigación Social, y también en las universidades de Nueva York, Harvard, Yale y Princeton. Ha sido galardonado con varios premios.
H. J. Eysenck (1916–1997), es el psicólogo de mayor impacto internacional en la Psicología actual y el más citado después de Freud. De origen alemán, emigró a Inglaterra (1934), donde estudió y desarrolló su labor como profesor de la Universidad de Londres, especialmente como director del Instituto de Psiquiatría del Maudsley Hospital, durante más de 40 años. Sus principales áreas de trabajo son: la personalidad y el temperamento, la psicología clínica, la psicopatología, la inteligencia, las actitudes, la conducta sexual, la criminología, la genética de la conducta y los estudios sobre el hábito de fumar. Ha sido uno de los psicólogos contemporáneos más prolíficos entre cuyos libros están: “The Biological Basis of Personality” (1967), “Psychology is about People” (1972) y “Psychoticism as a Dimension of Personality” (1976).
A su vez Raymond B. Cattell (1905–1998), es otro teórico-investigador prolífico como Eysenck, que explicó la capacidad cognoscitiva a través de la existencia de inteligencias fluidas y cristalizadas e hizo un uso extensivo del análisis factorial para estudiar la personalidad, con la aplicación de cuyo método elaboró el test 16 PF, aumentando la lista en siete factores tras nuevas investigaciones subsiguientes y, más tarde, se agregaron otros doce factores “patológicos” añadiendo variables del MMPI. Fue profesor de Psicología en la Universidad de Londres y escribió 55 libros, unos 500 artículos y estandarizó 30 pruebas psicológicas. Otro investigador de la personalidad es Henry A. Murray (1893–1988), que siendo médico pasó tres semanas con C. Jung, cuando estudiaba Psicología en Cambridge, y en adelante se dedicó en exclusiva a investigar sobre las zonas más profundas de la personalidad. Inventó varias técnicas de evaluación siendo la más nombrada el Test de Apercepción Temática (TAT), desarrollada en colaboración con C. L. Morgan. Fue premiado por la Asociación Psicológica Estadounidense y distinguido con la Medalla de Oro de la Fundación Psicológica Estadounidense.
Desde un plano, que podría calificarse de psicoantropométrico, William H. Sheldon (1898–1977), dedicó su vida a observar la variedad de cuerpos y temperamentos humanos, teorizando que la conexión entre los tipos físicos y los de personalidad son de origen embriogénico, en cuyo período se forman tres “mantos” o capas: el ectodermo que se convierte en piel y sistema nervioso; el mesodermo que se transforma en músculo; y el endodermo que constituye las vísceras. Con un planteamiento diferente, Arnold Buss (1924–) y Robert Plomin (1948–), estudian algunos aspectos del comportamiento en niños pequeños. Y Albert Mehrabian (1939–), elabora un modelo de temperamento tridimensional de las emociones, pudiéndose describir prácticamente cualquiera con estas tres dimensiones: placer-displacer (P), estimulación-no estimulación (A) y dominancia-sumisión (D). Mantiene que las personas tenemos una predisposición temperamental ante ciertas respuestas emocionales.
Alexander R. Luria (1902–1977), forma parte de la escuela psicológica histórico-cultural. Se inició como profesor de la Academia de Ciencias pedagógicas de la URSS y, más tarde, como Catedrático de Neuropsicología y Psicofisiología en la Universidad Lomonosov de Moscú. Trabajó durante años con Vygotsky en el Instituto de Psicología, del que fue su secretario. Tras pronunciarse (1925) críticamente en contra de la doctrina conductista de Pavlov, es apartado de la elite científica oficial de la URSS hasta la muerte de Stalin. Entonces abandonó sus comparecencias públicas y se centró en el estudio de la afasia y de la relación entre el habla y el pensamiento. Ingresó en la National Academy of Sciences de EEUU (1968), aunque siguió trabajando en Moscú hasta su muerte. Entre sus libros destacan: “Sensación y Percepción” (1975), “El papel del lenguaje en el desarrollo de la conducta” (1979), “Fundamentos de neuropsicología” (1981) “Lenguaje y comportamiento” (1984), “Conducta verbal” (1988) y “El cerebro en acción” (1988). Su obra aporta una concepción integral de la neuropsicología en cuanto a los fundamentos teóricos, los métodos clínicos, los síndromes y la terapia. Muchos descubrieron la neuropsicología a través de Luria y la confundieron e igualaron con la obra de este autor.
Erich Fromm (1900–1980), como casi todos los autores que estamos estudiando, refleja en su teoría parte de su historia. Fue un hombre muy interesado en la religión y lo deja plasmado en sus escritos.
Al estallar la I Guerra Mundial comenzó a estudiar Psicología y Sociología en la Universidad de Heidelberg, doctorándose en Filosofía (1922). Fue uno de los primeros psicoanalistas que no estudió Medicina y se separó del psicoanálisis ortodoxo ante la falta de reconocimiento de las fuerzas sociales y económicas en la formación de la personalidad. Llegó a EEUU (1933), en plena depresión económica y ayudó en la fundación del Instituto W. Alanson para la psiquiatría, el psicoanálisis y la psicología.
Ejerció de profesor en psiquiatría (1949-1965) y se trasladó a Suiza (1976) hasta su muerte.
Un personaje un tanto curioso es Erik H. Erikson (1902–1994), quién después de diversos avatares biográficos, se psicoanaliza con A. Freud (1927) en el Instituto Psicoanalítico de Viena. En Dinamarca intenta ejercer el psicoanálisis sin éxito y emigra a EEUU donde se cambia el nombre de Homburger por el de Erikson. Allí trabaja en varias universidades: Harvard (1934–35), Yale (1936-39), Berkeley (California) y San Francisco (1939-51), y de nuevo Harvard (1960–70), hasta su jubilación. Sus principales obras son: “Infancia y sociedad” (1950), “Identidad: juventud y crisis” (1968), “El ciclo completo de la vida” (1982) e “Implicación vital de la tercera edad” (1986). En esos años Leon Festinger (1919–), está de profesor en la Universidad de Stanford y en la de Nueva York, y es autor de interesantes trabajos de Psicología Social que han servido de base para investigaciones sobre los fenómenos de grupo, en especial, acerca de la cohesión y las reacciones ante la desviación. Entre sus obras destaca “Conflicto, decisión y disonancia” (1964). Más conocido que los anteriores es Albert Bandura (1925–), que se doctora en Psicología por la Universidad de Iowa (1952), bajo la influencia de la tradición conductista y las teorías del aprendizaje.
Su primer libro es “Agresión del Adolescente” (1959). Pero donde presenta sus puntos de vista sobre el aprendizaje social y el moldeamiento es en “Aprendizaje Social y Desarrollo de la Personalidad” (1963). Además, publica “Principios para la Modificación de la Conducta” (1969) y “Modelamiento Psicológico” (1971). Dos años más tarde se publica “Agresión: Análisis del Aprendizaje Social”. Su última publicación se titula “Self-Efficacy: The exercise of control” (1997), Bandura es presidente de la APA (1973) que le premia en 1980 por su destacada contribución científica. Otros premios recibidos son: William James de la Sociedad Psicológica Americana; James McKeen Catell; y de la Sociedad Internacional de la Investigación Científica sobre Agresión. También preside la Asociación Western Psicológica (1981) y es presidente honorario de la Asociación Psicológica Canadiense. Continúa trabajando en la Universidad de Stanford.
George Kelly (1905–1967), enseña Psicología Fisiológica en Fort Hays Kansas State College (1931) y usa el entrenamiento freudiano estándar, pero ni él mismo estaba conforme con las interpretaciones ya que le parecían un poco fuera de tiempo y lugar. Sustituye a C. Rogers en la Universidad Estatal de Ohio (1946), encargándose de la dirección de su programa clínico. Fue aquí donde su teoría maduró y donde escribió sus dos volúmenes sobre “La Psicología de los Constructos”.
Realizó investigación en la Universidad de Brandeis (1965), donde trabajaba Maslow, pero al poco tiempo murió. De Bruno Bettelheim (1903-1990), hay que decir que fue un escritor y psicólogo infantil estadounidense de origen austriaco que ha dejado una gran impronta en la Psicología y Psiquiatría del XX. Fue profesor de Psiquiatría en la Universidad de Chicago (desde 1944) y director del Colegio Sonia Shankman, un centro de educación y estudio de niños psicóticos, en el que, basándose en sus experiencias de cautiverio se especializó en niños autistas. Escribió libros acerca de la psicología normal y anormal de los niños, como: “Los niños necesitan cuentos”, “El amor no basta” (1950), “La fortaleza vacía” (1967), “No hay padres perfectos” (1994) y “Psicoanálisis de los cuentos de hadas” (1999). Víctima de la depresión, se suicidó seis años después de que su esposa muriera de cáncer.
Aunque Eric Berne (1910-1970), es considerado el inventor del Análisis Transaccional, su modelo de psicoterapia lo elaboró a partir de la influencia recibida de P. Federn y E. Erikson, con quienes se psicoanalizó. Con un equipo de colegas organizó unos seminarios en San Francisco (California) y realizó investigaciones con ayuda de la Internacional Transactional Analysis Association, fundada por él mismo, lo que ha permitido profundizar en ciertos conceptos y aportar enfoques diferentes de su teoría. Por otra parte, Lawrence Kohlberg (1927-1987), se doctoró en Filosofía y realizó su tesis doctoral (1958) sobre el desarrollo del juicio moral. Gran parte de su teoría acerca del desarrollo moral y de la autonomía se desarrolla en la Universidad de Harvard (1968-1987) y, posteriormente, en el Centro para el Desarrollo y la Educación Moral.
La referencia que hacemos de Lee J. Cronbach (1916–2001), corresponde a Fernández Ballesteros, la cual fue publicada en la Revista Papeles del Psicólogo (junio, 1986, nº 26). Es uno de los autores más citados en la Psicología contemporánea con un promedio superior al de autores como Rogers, McClelland o Neisser. Es citado en fuentes periódicas de carácter general, básico y experimental, tales como: American Psychologist o Psychological Bulletin, Journal of Educational Psychology o Journal of Consulting and Clinical Psychology. Ha realizado una valiosa aportación en beneficio de la Psicología, acerca del carácter explicativo de los principios psicológicos.
Impartió docencia en diversas instituciones universitarias: State College de Washington, Universidad de Chicago, de Illinois y de Stanford; Fullbright Lecturer en la Universidad de Tokio; Presidente de la APA, división de Evaluación y Medición, de la Psychometric Society, de la American Educational Research Association y de la American Psychological Foundation; miembro del Institute for Advanced Study, del Center for Advanced Studies in the Behavioral Sciences, de la Fundación Guggenheim, de la National Academy of Education, de la American Philosophical Society, de la American Academy of Arts and Sciences, de la National Academy of Sciences, y miembro de honor de la Sociedad Española de Psicología. También es doctor Honoris Causa de las Universidades de Yeshiva, Goothenburg, Chicago, lllinois (Urbana) y ha recibido varios premios y distinciones por su contribución científica destacada.
Reuven Feuerstein (1921–), es acreedor de nuestro reconocimiento por ser un líder de opinión científica en la actualidad. Sus contribuciones en el plano teórico y metodológico destacan por ser una síntesis original a partir de varias fuentes que han probado su validez científica en la práctica.
Dirigió el Seminario de Entrenamiento del Profesor en Jerusalén (1944-45) y continuó su educación en Suiza (1949), donde se interesó por los trabajos de C. Jaspers, C. Jung y L. Szondy. Asistió a la Universidad de Ginebra (1950-1955), donde, bajo la dirección de A. Rey y J. Piaget, obtuvo el postgrado en psicología general y clínica (1952) y su licenciatura en psicología (1954). Se doctoró en Psicología del Desarrollo por la Sorbona (1970) y sus campos de estudio más importantes son la psicología del desarrollo, la clínica y la cognoscitiva, desde una perspectiva transcultural. Ha sido Profesor de psicología educativa en la Escuela de Educación de la Universidad de Ilan (Ramat Gan, Israel 1970-1995), Director del Instituto de Investigación de Hadassah-WIZO- (Canadá) y forma parte del Centro Internacional para el Desarrollo del Potencial del Aprendizaje en Jerusalén (Israel, desde 1993). Feuerstein ha combinado la investigación, el entrenamiento y el servicio con las poblaciones necesitadas del desarrollo cognoscitivo. Ha generado dos teorías y producido tres programas de extraordinario impacto en la ciencia contemporánea.
Distinta es la trayectoria de Howard Gardner (1943–), que se ha dedicado a investigar sobre la inteligencia en la Universidad de Harvard y ha puesto en jaque el sistema educativo norteamericano, siendo conocido como el creador de la teoría de las inteligencias múltiples, la cual se haya expuesta en “Frames of Mind: The Theory of Multiple Intelligences” (1983). Otros trabajos suyos son:
“La inteligencia múltiple” (1993) y “Mentes extraordinarias” (1997). Es el primer americano que ha recibido el Premio de Educación Grawmeyer de la Universidad de Louisville. A su vez, Jerome S. Bruner (1915- ), se doctoró en Psicología por la Universidad de Harvard (1947), donde estaba como profesor (1945-72), y promovió el Center for Cognitive Studies. Más tarde enseña en la Universidad de Oxford (1972-79) y vuelve a Harvard como visitante. Se incorporó a la School for Social Research de Nueva York (1981) y, como profesor visitante, a la Facultad de Derecho de la Universidad de Nueva York (1991). Perteneció al consejo asesor científico de los presidentes norteamericanos Kennedy y Johnson. Premio internacional Balzac, CIBA y de la APA. Doctor “honoris causa” por diversas universidades: Bolonia y Salerno (Italia), Autónoma de Madrid y Girona (España), París V y Toulouse (Francia). Su pensamiento constructivista en el campo de la educación, la psicología evolutiva y las ciencias cognitivas está expuesto en las publicaciones siguientes:
“A Study of Thinking” (1956), “The Process of Education” (1960), “Processes of Cognitive Growth” (1968) “The Relevance of Education” (1971), “Beyond the Information Given” (1973) y “Child’s Talk” (1983). Finalmente, Robert Gagné (1916- ), trata de integrar distintas teorías del aprendizaje en una sola que sirva tanto para la planificación curricular como para lograr mejores aprendizajes aplicando las técnicas de estudio más apropiadas. Sus ideas sobre aprendizaje se encuentran en “Las condiciones del aprendizaje” (1985).
No puede faltar nuestro reconocimiento al psicólogo norteamericano Stanley Milgram (1933– 1984), graduado de la Universidad de Harvard (1960). Es famoso por haber demostrado, a través de distintos experimentos, que cualquier persona puede hacer sufrir a otros con sólo recibir órdenes de alguien que considera autoridad. Este razonamiento lo aplicó al entrenamiento de policías y militares con el objetivo de enseñar a maltratar y practicar comportamientos que fueran vejatorios y humillantes para las personas. Sus métodos de entrenamiento los aplicaron las psicólogas Gibson y Haritos-Fatouros durante la dictadura griega (1967-74).
De igual modo, E. P. Torrance (1922- ), es conocido sobre todo porque haber sintetizado los conceptos básicos de la creatividad. Los estudios y el desarrollo de la creatividad han tenido un tremendo impacto en la educación en muchas partes del mundo. La creatividad no sólo se emplea en el ámbito de las artes sino que también juega un importante papel en la vida cotidiana. Una de sus principales obras es la titulada “Guiding Creative Talent” (1984), como también lo es la batería de Test de Torrance de Pensamiento Creativo que pueden ser utilizados desde Educación Infantil hasta la Universidad. En el ámbito de la Psicología Social destaca Philip G. Zimbardo (1933- ), que investiga el comportamiento colectivo y es conocido, especialmente, por el Experimento de la cárcel de Stanford. Es el actual presidente de la APA (2002). También merece una reseña Kenneth E. Wilber Jr. (1949 -), escritor estadounidense, que busca integrar la psicoterapia y la espiritualidad y ha contribuido al desarrollo de la Psicología Transpersonal. Denomina a sus planteamientos psicológicos como Psicología integral y la relaciona con el modelo de la Dinámica Espiral desarrollada por Don Beck y Chris Cowan.
Lo más innovador en Psicología, actualmente, es el movimiento liderado por Martin E. P. Seligman (1942–), catedrático de Psicología de la Universidad de Pennsylvania y director de la Red de Psicología Positiva. Ésta favorece el desarrollo de las emociones placenteras, el de las virtudes y la búsqueda de la felicidad. Actual Jefe del Departamento de Psicología de la Universidad de Pensilvania (2005), ha ocupado el cargo de presidente de la APA (1996-02) y ha sido el primer redactor jefe de la Prevention and Treatment magazine, su boletín electrónico. Seligman ha escrito best-sellers de Psicología Positiva como: “The Optimistic Chile”, “Learned Optimism”, “Authentic Apiñes” y “What You Can Change and What You Can’t” , con lo que está provocando una auténtica revolución en la Psicología que, hasta ahora, se había centrado casi exclusivamente en los traumas, trastornos y patologías.