Punto de vista dinámico: dinámica mental

DINÁMICA MENTAL
La psicología psicoanalítica explica los fenómenos psíquicos como el resultado de
la acción recíproca y de la acción contraria de fuerzas, esto es, de una manera
dinámica, que es al mismo tiempo genética, puesto que no sólo examina un
fenómeno como tal sino las fuerzas que lo producen.

Hay un tipo especial de fuerzas, los impulsos instintivos, que son directamente
experimentados como una energía apremiante, instan a una acción inmediata y uno
se siente impulsado por fuerzas de diversa intensidad para cumplirlos. La parte no
instintiva de la mente humana resulta comprensible como un derivado de la lucha en
pro y en contra de la descarga, creada por influencia del mundo externo. Existe otro
tipo de fuerzas, los triebe o impulsos, que son variables en su fin y en su objeto por
acción de fuerzas derivadas del ambiente.
La dinámica mental lleva a una homeostasis, que no implica una inamovilidad, sino
un trabajo constante de las funciones vitales.
La homeostasis se encuentra, en
principio, en la raíz de toda conducta instintiva y las conductas "anti –
homeostáticas" se explican como una complicación secundaria a fuerzas externas.
Cuando las tendencias a la descarga y las tendencias inhibitorias son igualmente
fuertes, no hay signos exteriores de actividad, pero se consume energía en una lucha
interna oculta.