Para entender las vivencias que caracterizan a la adolescencia debemos partir de cuáles son las tareas esenciales de desarrollo que deben completar:
1. Pasar de la dependencia a la independencia en la relación con sus padres.
2. Establecer una identidad personal positiva y congruente (aunque no acrítica) con las normas sociales.
3. Aprender a relacionarse de adulto a adulto en relaciones caracterizadas por la intimidad.
Si nos adentramos en las vivencias adolescentes, nos encontramos con lo que
algunos autores han denominado “el síndrome normal de la adolescencia”. Este síndrome está caracterizado por tres rasgos esenciales: una crisis global de identidad, un proceso de separación de los padres con un reforzamiento de la tendencia grupal y el desarrollo cognitivo, afectivo y sexual.
Constitución de la personalidad: crisis en la identidad, “Disarmonía Evolutiva”, duelos
Mecanismos de defensa y ajuste del adolescente
Desarrollo de la sexualidad: pase por el autoerotismo y la identidad genital adulta
El adolescente y su autonomía de los padres (conflicto dependencia-independencia)
El adolescente y su afiliación grupal: transición para el mundo externo
Cambio en las relaciones del sistema familiar: proceso de individualización de adolescentes y padres