VALORACIÓN GLOBAL DE LA REFORMA PSIQUIÁTRICA
Una vez expuestos brevemente los movimientos de reforma psiquiátrica que más han influido en el devenir posterior de la asistencia psiquiátrica comunitaria hay que destacar que en todos ellos subyace un mismo hilo conductor, que parte de un cuestionamiento tanto social como terapéutico de la influencia negativa del manicomio en el paciente, la denuncia pública del mismo por parte de un grupo de profesionales y de la sociedad en general que se hacen eco de ese clima de libertad e igualdad que influirá en los cuidados que se ofrecen a los enfermos mentales. El apoyo administrativo a este nuevo enfoque mediante el desarrollo de leyes, actas y reuniones que cristalizó en las nuevas directrices que siguió la asistencia psiquiátrica de los años posteriores. Una vez llevado a cabo el cambio hacia una psiquiatría más comunitaria (en unos países de forma más radical y en otros menos) se ha pasado, en la década de los 90, a un período de reflexión en el que se están cuestionando los avances alcanzados a partir de estos planteamientos. Como en todos los procesos de cambio, siempre hay voces a favor y en contra de las nuevas situaciones.
De lo que no cabe duda es que estamos ante un nuevo abordaje a la atención al enfermo mental crónico y ante una nueva concepción de la oferta de servicios de salud mental.
Tampoco hay duda de que los procesos de reforma de la atención a la salud mental han supuesto un importante avance en las prestaciones ofertadas a los ciudadanos, aunque no por ello debemos ser insensibles a las críticas acerca de las deficiencias reales que este modelo ha reportado (Fernández Liria, 1997).
A partir de lo expuesto anteriormente, una de las medidas necesarias para mejorar el conocimiento de lo que ha acontecido en los procesos de reforma psiquiátrica sería el desarrollar una evaluación crítica y un análisis de estos modelos de atención basados en parámetros e indicadores fiables y normalizados que permitieran hacer estudios comparativos entre diversas experiencias comunitarias y que ofrecieran información acerca de la utilización de servicios real que realizan los pacientes para valorar adecuadamente su situación y poder afrontar los problemas acaecidos a la luz de dicha información.